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Pocos días para poner la guinda a dos años sobresalientes con Imanol y Xabi Alonso como líderes

La Real quiere vivir el sábado un día histórico. Una victoria ante Osasuna garantizaría la mejor posición en una temporada en la que jugaba competición europea desde 1988 y la del Sanse ante el Algeciras le devolvería a una categoría perdida al descender el primer equipo en 1962.

Olabe y Aperribay presentaron a Imanol como entrenador el 26 de diciembre de 2018. (Gorka RUBIO/FOKU)

El 26 de diciembre de 2018 el presidente de la Real Sociedad Jokin Aperribay presentaba a Imanol como entrenador del primer equipo cuando estaba decimoquinta tras cuatro derrotas seguidas y para sustitiuir al oriotarra el 1 de junio de 2019 anunciaba el fichaje de Xabi Alonso para encargarse del Sanse.

Desde ese momento la Real tiene el lujo de contar con dos de los mejores entrenadores del fútbol estatal en su estructura, dos auténticos líderes para sus equipos y los años que han podido planificar la temporada lo demuestran con la progresión de las plantillas más jóvenes de sus categorías.

Imanol ha conseguido transmitir su espíritu competitivo y ambicioso al equipo para que desarrolle el estilo de fútbol en el que se siente más cómodo, adaptándose a otras variantes. Así han conseguido el primer título masculino desde la Copa de 1987 y estar entre los siete primeros en 69 de las 75 jornadas.

Solo en tres de las cinco primeras de esta temporada y en tres de la pasada ha estado la Real por debajo de la séptima plaza y en la actual desde la sexta jornada su peor puesto ha sido el séptimo de la jornada 31.

Firme en la quinta plaza

Ésta ha sido la única en la que el equipo blanquiazul no ha estado quinto a pesar de la cantidad de problemas que ha tenido en forma de lesiones, sobre todo la de David Silva, que le ha impedido asegurarse la clasificación para la Europa League antes.

Imanol ha conseguido que su equipo compita cada tres días en la temporada en la que más partidos ha jugado –49– en menos tiempo –ocho meses y tres días–, algo a lo que no estaba acostumbrada la Real. Desde 1988 solo se había clasificado séptima en la 2013-14 en una temporada en la que jugaba en Europa y en el verano siguiente no consiguió entrar en la fase de grupos de la Europa League.

Una victoria ante Osasuna permitiría a la Real acabar en la posición que más tiempo ha ocupado toda la temporada y poner la guinda a dos años de ensueño con una clasificación para la Europa League como quinta, con el extra económico que eso supone por unos mayores ingresos televisivos.

No es menor el mérito de Xabi Alonso en sus dos años como entrenador del Sanse porque ha liderado una renovación absoluta del filial. De la plantilla que entrenaron Imanol y Zulaika en la temporada 2018-19 han dejado el equipo en estos dos años casi todos los jugadores importantes –Guevara, Aihen, Zubimendi, Roberto López, Lapeña, Zubiaurre, Thior, Nais, Olaizola, Gorostidi, Barrenetxea y Guridi–.

El gran mérito de Xabi Alonso

Con esos jugadores, aunque algunos ya empezaron a subir al primer equipo, el filial acabó duodécimo. En la primera temporada con Xabi Alonso se renovó totalmente el equipo y llegó al confinamiento tras 28 jornadas en quinta posición de su grupo con 44 puntos, a tres de la cuarta posición que daba acceso al play-off de ascenso.

De los 24 jugadores más utilizados en la temporada 2018-19 solo siguen Petxarroman, Jiménez, Arambarri, Veiga, Ezkurdia y Álex Sola, que ha empezado a jugar ahora tras superar su grave lesión. Con una plantilla muy joven el filial en los últimos 19 partidos ha conseguido catorce victorias, tres empates y solo dos derrotas que le han permitido llegar como primero de grupo a la lucha por el ascenso a Segunda que peleará el sábado a las 20.00 contra el Algeciras en Almendralejo.

Los blanquiazules, con la ventaja de que el empate les valdría al final de la prórroga por ser primero de grupo, tienen la opción de devolver al filial a una categoría que perdió en 1962 por el descenso del primer equipo. Entonces la Segunda la formaban 32 equipos divididos en dos grupos de 16, el Sanse acabó quinto del suyo, con lo que el mérito de ascender a una categoría de 22 será mayor.

Jugar en Segunda premiaría la decisión de Xabi Alonso de renovar a pesar de que se le situó en la órbita de equipos como el Borussia Moenchengladbach y ayudaría a la progresión de una plantilla muy joven porque solo Jiménez, Petxarroman y Alkain superan los 22 años.