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El Ararteko insta a promover el autoconsumo de renovables para combatir la pobreza energética

El Ararteko de la CAV, Manuel Lezertua, ha pedido este lunes a los poderes públicos que promuevan la creación de comunidades de autoconsumo de energía eléctrica procedente de fuentes renovables como un medio para combatir la pobreza energética.

Arantxa Tapia y Manuel Lezertua en la jornada sobre energía y consumo organizada por el Ararteko este lunes en Bilbo. (ARARTEKO)

El Ararteko y la consejera de Desarrollo Económico del Gobierno de Lakua, Arantxa Tapia, han inaugurado este lunes en Bilbo la jornada ‘Obstáculos y buenas prácticas para garantizar la participación de los consumidores energéticos vulnerables en las comunidades energéticas locales de Euskadi’.

Esta jornada, promovida por el Ararteko, se celebra durante la semana europea de la pobreza energética. En este marco, Lezertua ha hecho una doble reflexión.

Por un lado, ha dicho que la emergencia climática en la que se encuentra el planeta requiere una transición ecológica y energética para paliar los efectos más graves del cambio climático.

Por otro, ha remarcado que «tenemos una obligación ética de actuar y de alcanzar una transición justa, en la que no se deje atrás a ningún colectivo, en especial a los más vulnerables, y que ponga al ciudadano en el centro de las políticas energéticas y climáticas».

Comunidades locales

Para combatir la pobreza energética, una cruda realidad que padecen muchos hogares, en especial en los meses de invierno, el Ararteko ha propuesto como una de las vías el autoconsumo a través de las comunidades energéticas locales (CEL).

Estas son entidades de consumidores constituidas para promover el autoconsumo de energía procedente de fuentes renovables de forma colectiva a través de socios locales.

«Son una oportunidad para permitir una mayor aceptación local de las energías renovables y una mejor participación de toda la ciudadanía en la transición energética», ha opinado Lezertua.

Por ello, ha subrayado que los poderes públicos «deben tener en cuenta el potencial que tienen las CEL para reducir la factura de la electricidad y disminuir la dependencia energética de las familias, en especial, de aquellos colectivos de consumidores más vulnerables».