La nueva ley navarra fijará en 1.250 el número máximo de cabezas de vacuno en las granjas
La nueva ley navarra de sanidad animal fijará en un máximo de 1.250 cabezas el tamaño de las explotaciones ganaderas. La norma no obligará a cerrar ni a reducir la macrogranja de Caparroso, pero sí que le impedirá ampliar sus instalaciones.
La comisión de Desarrollo Rural y Medio Ambiente del Parlamento navarro ha aprobado el dictamen de la nueva ley de sanidad animal, que limita las explotaciones ganaderas de vacuno de leche y carne a un máximo de 1.250 cabezas.
De este modo, Nafarroa contará, tras ser aprobada la ley en el Pleno (previsiblemente el 3 de marzo), con una herramienta para limitar la extensión de las macrogranjas, cuyos efectos en el medio ambiente han sido denunciados.
En Nafarroa, la cuestión se ha centrado en la macrogranja que la cooperativa Valle de Odieta tiene en Caparroso. Oficialmente hay 3.450 cabezas, aunque algunas fuentes elevan esta cifra hasta los 5.000. El TSJN, en base a la legislación vigente actualmente, le permitió aumentar su capacidad hasta los 7.200. Tras esta sentencia, el Gobierno navarro procedió a impulsar un cambio legislativa para limitar el número máximo de cabezas.
Sin embargo, la nueva ley navarra no afectará al proyecto de macrogranja que Valle de Odieta tiene en Noviercas, en la provincia castellana de Soria, donde tiene previsto albergar 25.000 vacas, más que la cabaña actual de toda Nafarroa.
Las últimas noticias relacionadas con la macrogranja de Caparroso es que Valle de Odieta ha denunciado judicialmente a representantes de organizaciones ambientales navarras que entregaron en el Parlamento un dossier sobre los efectos de los purines en la zona.
Sin nuevos aumentos
La nueva ley navarra introduce una disposición adicional para permitir que las explotaciones que a la entrada en vigor de la norma superen estos límites puedan seguir funcionando, aunque no podrán realizar modificaciones de instalaciones o aumentar su tamaño. Es decir, que la nueva ley no supondrá el cierre de la macrogranja de Caparroso ni obligará a Valle de Odieta a reducir su tamaño. Lo que no podrá es aumentar más sus instalaciones.
I-E quería reducir las explotaciones hasta 850 cabezas de vacuno y 720 de porcino, pero su propuesta no ha recibido el apoyo del resto de los grupos.
En cuanto a las distancias entre explotaciones se mantiene el decreto foral de 2019, por el que se establecen las condiciones higiénico sanitarias de bienestar animal y ordenación zootécnica, medidas todas de carácter preventivo (bioseguridad) para evitar la difusión y el impacto de enfermedades.
Las distancias se determinan teniendo en cuenta las circunstancias geográficas y las características de las especies ganaderas, el tamaño de la explotación, el tipo de explotación y el riesgo epidemiológico.
No ha prosperado la pretensión de hacer constar como criterio el carácter intensivo o extensivo de la explotación, tal y como pedía una tercera enmienda de EH Bildu y que solo ha tenido el apoyo de I-E.
En el transcurso del debate efectuado en Comisión se han debatido y rechazado las siete enmiendas presentadas por EH Bildu, incluidas las que promovían mejoras de redacción o cambios terminológicos como el de sustituir «tamaños máximos» por «capacidad productiva máxima».