Ucrania renuncia a abrir corredores humanitarios por «posibles provocaciones rusas»
«Posibles provocaciones» atribuidas a Rusia. Este es el argumento empleado por Ucrania para renunciar a la apertura de nuevos corredores humanitarios previstos para hoy en Mariupol y Sumy. Por otra parte, Turquía ha notificado que ha encontrado una segunda mina procedente de Ucrania.
Ucrania renuncia a abrir corredores humanitarios este lunes por «posibles provocaciones» de la parte rusa, ha informado hoy la viceprimera ministra y titular de «Reintegración de los Territorios Temporalmente Ocupados» de Ucrania, Irina Vereshchuk.
«Nuestra inteligencia reportó posibles provocaciones por parte de los ocupantes en las rutas de los corredores humanitarios. Por eso, por razones de seguridad ciudadana, hoy no se abrirán corredores humanitarios», ha anunciado Vereshchuk a través de su cuentas de Facebook y Telegram.
En tanto, la agencia Unian recuerda que ayer había habilitados dos corredores de evacuación, ambos en la zona de Donbass, a través de los cuales se logró trasladar «a territorio pacífico» a más de mil personas.
Inicialmente, para hoy estaba previsto continuar trabajando la ruta de evacuación de Mairúpol y abrir un corredor en la región de Sumy.
«Seguimos trabajando en acuerdos para abrir rutas adicionales de corredores humanitarios», afirmó Vereshchuk ayer en un vídeo mensaje.
Segunda mina en el mar Negro
Turquía, por su parte, ha encontrado hoy en aguas del mar Negro una mina marina, en lo que parece ser el segundo objeto de este tipo que, procedente de las costas de Ucrania, ha sido detectado hasta ahora por las autoridades turcas.
Según ha informado el Ministerio de Defensa turco en un comunicado, la mina ha sido hallada «en la costa de Igneada (una pequeña ciudad en la zona occidental del Mar Negro), cerca de la frontera búlgara, en la mañana del 28 de marzo de 2022».
Tras asegurar el objeto, los equipos de Defensa Submarina (SAS) que se trasladaron al lugar del incidente comenzaron una «intervención para neutralizarlo», añade la nota.
El pasado sábado, un buque civil comercial detectó en aguas del Bósforo, cerca de la conexión con el mar Negro, un objeto flotante que luego, según informó la emisora NTV, resultó ser una mina rusa modelo antigua.
Durante la operación para recuperarla y neutralizarla, las autoridades cerraron durante horas el tráfico de cargueros por el Bósforo en ambas direcciones.
Rusia había advertido de que centenares de minas ucranianas habían quedado a la deriva en el mar Negro tras desprenderse de sus anclajes, una información que luego Ucrania desmintió, acusando a Moscú de desinformar para intentar forzar un bloqueo de los mares.
Sea como sea, las autoridades turcas alertaron ya hace una semana sobre el posible arrastre, por corrientes marinas, de minas marinas que supuestamente formaban parte de la defensa de la ciudad ucraniana de Odessa contra ataques rusos y que habían quedado a la deriva tras una tormenta. También Bulgaria emitió una advertencia similar.
Derribo de drones ucranianos
El Ministerio de Defensa ruso, por su parte, ha anunciado que ha destruido 19 drones ucranianos, según señala su representante, Igor Konashenkov, en TV Zvezda, órgano del Ejército ruso.
Asimismo, Konashenkov ha cifrado en 1.713 los tanques y otros vehículos blindados de combate destruidos por las fuerzas rusas «durante todo el periodo de la operación especial».
Asimismo, en la jornada del 27 de marzo, la Fuera Aérea rusa atacó 36 instalaciones militares en territorio ucraniano, según informa Russia Today. En estas operaciones, derribaron cuatro aviones Su-24 de la Fuera Aérea ucraniana.
A su vez, las tropas de la República Popular de Lugansk avanzaron durante una ofensiva de cinco kilómetros y tomaron el control de los pueblos de Ivanovka y Novosadovoye. Junto a ello, en Donetsk derribaron un caza ucraniano Su-27.
Parte ucraniano
El Estado Mayor de las Fuerzas Armadas ucranianas cifró hoy en unos 17.000 los soldados rusos muertos y heridos desde el comienzo de la invasión rusa de Ucrania al comunicar el número de bajas totales, que no precisa cuántos murieron.
Entre el 24 de febrero y el 28 de marzo, las tropas rusas perdieron además, 586 tanques 1.694 vehículos blindados de combate, 302 sistemas de artillería, 95 sistemas de lanzamiento múltiple de cohetes (MLRS) y 54 sistemas de defensa antiaérea, según el listado publicado en Facebook y citado por la agencia ucraniana Ukrinform.