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El Gobierno de Irán investigará el veto a la entrada de las mujeres en un partido de fútbol

Las mujeres, que previamente habían comprado sus entradas para acudir el martes al duelo entre Irán y Líbano que se disputó en estadio Imam Reza de la ciudad sagrada de Mashhad, fueron rociadas con gas pimienta. Las imágenes en las redes sociales han motivado el escándalo y la investigación.

La policía impide a las iraníes entrar a un estadio pese a disponer de sus entradas. (NAIZ)

Las autoridades iraníes han anunciado este miércoles dos investigaciones después de que el martes no se permitiera la asistencia de mujeres a un partido de fútbol internacional y fuesen rociadas con gas pimienta por protestar contra ello.

Las imágenes de mujeres siendo rociadas con gas pimienta en las redes sociales por protestar contra la prohibición de asistir al Irán-Líbano clasificatorio para Mundial de Qatar a pesar de que previamente se les hubiese vendido las correspondientes entradas, ha generado un aluvión de críticas en el país persa.

Ante ello, el presidente de Irán, Ebrahim Raisí, ha anunciado este mismo miércoles en una reunión del Ejecutivo que se investigará el incidente del martes y la violación de los derechos de los ciudadanos que habían comprado entradas para ver el partido.

El mandatario no ha mencionado en ningún momento el hecho de que no se hubiera permitido la entrada de mujeres al estadio Imam Reza de la ciudad sagrada de Mashhad, en el noroeste del país.

Por su parte, el presidente del Parlamento iraní, Mohamad Baqer Qalibaf, ha ordenado a una comisión parlamentaria investigar «el indigno tratamiento a las mujeres» a la entrada del estadio, al tiempo que el partido en cuestión lo ganaba Irán frente al Líbano por 2-0.

«El comportamiento irracional e irrespetuoso frente a mujeres respetables ha afectado y creado malestar en el público», ha declarado Qalibaf.

Asimismo, el fiscal general de Irán, Mohamad Yafar Montazerí, se ha apresurado en pedir perdón a las aficionadas al fútbol.

«Pido disculpas a las mujeres», ha dicho Montazerí, quien ha añadido que «si no se daban las condiciones para que las mujeres asistieran al estadio, no deberían haber vendido entradas desde el principio».

Mientras tanto, la Federación de Fútbol de Irán ha «lamentado» lo sucedido, pero afirmando a su vez en un comunicado que «no se pusieron» a la venta «entradas especiales para mujeres», porque se decidió «a última hora» que se permitiría público en el partido, y «no daba tiempo» para realizar los «preparativos necesarios» para que fuesen aficionadas también.

Según el citado organismo, solo «nueve mujeres» compraron entradas, pero en la zona de hombres, y otras mujeres habían comprado «entradas falsas», por lo que no se permitió su entrada.

«Ningún responsable –de la federación– instó a las mujeres a que comprasen entradas», ha indicado el organismo deportivo en el comunicado.

Prohibición en vigor hasta 2019

Después de la Revolución de 1979, durante 40 años, la República Islámica de Irán no permitió la asistencia de mujeres a los estadios, un tabú que se rompió en 2019, en un partido entre las selecciones de Irán y Camboya al que acudieron 3.500 mujeres, ante las presiones de la FIFA.

Pero la irrupción de la pandemia del coronavirus puso fin a la asistencia a partidos y por ello no volvió a repetirse la presencia de mujeres en los estadios hasta este año 2022.

A finales de enero, por segunda vez en cuatro décadas, se permitió la asistencia en Teherán de unas 2.000 aficionadas al encuentro de Irán contra Irak, en el que los iraníes sellaron su clasificación para el Mundial de Qatar.