Los dominicos de Gasteiz piden perdón a una víctima de abusos que denunció hace 12 años
Los dominicos han admitido que «existen posibles indicios para reconocer como víctima» de abusos sexuales a un hombre que en 2010 denunció en la diócesis de Gasteiz haber sido objeto de abusos por parte de un fraile de esta orden, y le piden «perdón».
Doce años después de la denuncia y a través de una nota de prensa difundida este viernes, la Provincia de España de la Orden de Predicadores afirma que se investigó el caso concluyendo que estaba prescrito y que los hechos acontecidos en la intimidad no pudieron acreditarse.
«No obstante, tras el seguimiento dado al caso, consideramos que existen posibles indicios para reconocer como víctima» al hombre que denunció esos abusos sexuales ocurridos en la parroquia de Los Ángeles de Gasteiz en 1983.
Por ello la orden le «pide perdón por el sufrimiento que haya podido padecer» y «manifiesta su firme compromiso, compartido por el Obispado de Vitoria, para resolver estos casos intentando buscar la verdad, protegiendo a las posibles víctimas y poniendo todos los medios que están a su alcance para que no se produzca ningún tipo de comportamiento inapropiado».
Finamente, reiteran su «repulsa» ante este tipo de actitudes y «ante cualquier abuso» y dirigen a toda persona que haya podido sufrir hechos similares por parte de algún miembro de su institución a que lo denuncie a las autoridades competentes y a través de una dirección de correos habilitada por los dominicos: proteccion@dominicos.org.
La nota no da pistas sobre si el abusador ha fallecido o no, ni avanza ningún acto de reparación más allá de este reconocimiento público.
Proliferación de casos
En los últimos años, cada vez son más las víctimas que han denunciado los abusos por parte de religiosos y la Fiscalía investigaría al menos cuatro solo en Araba, lo que ha dado pie a un intento para realizar un proceso de reparación conjunto homologable al de otros países europeos y que iba a encabezar el Defensor del Pueblo.
La Iglesia, sin embargo, pretende habilitar un proceso de reparación paralelo, a través de un bufete de su confianza (Cremades & Calvo Sotelo). De ahí que haya anunciado una negativa a colaborar con el Defensor del Pueblo.
Como fórmula alternativa a la vía del Defensor, Nafarroa ha iniciado la tramitación definitiva de una ley que incluye la creación de un comité de verificación de casos, inspirado en los que se habilitaron en otros países. La norma parte con mayoría suficiente como para salir, pero el descuelgue y el discurso duro que marca contra esta ley Navarra Suma parece adelantar que el resultado final también será boicoteado por la diócesis.