Inglaterra hace historia en su Eurocopa
La anfitriona se impone en la final a Alemania (2-1) para adjudicarse su primer torneo internacional. Es la segunda Eurocopa consecutiva de Sarina Wiegman. 87.192 espectadores han abarrotado Wembley.
Cinco años después, se repite la historia. Como hizo Países Bajos en su Eurocopa, Inglaterra se ha adjudicado su primer título internacional en el torneo que ha acogido durante las cuatro últimas semanas. De nuevo con Sarina Wiegman en el banquillo, que iguala a Silvia Neid con dos cetros continentales y se sitúa a uno de Tina Theune.
También como entonces, las campeonas han ganado todos sus partidos –doce victorias de doce posibles para la entrenadora neerlandesa–. El último, en un Wembley abarrotado (87.192 espectadores, récord de la competición en categoría tanto femenina como masculina) y ante una Alemania que había ganado sus ocho finales anteriores y que vuelve al podio tras sus últimos fiascos. Ha perdido como se espera del equipo teutón, rehaciéndose tras verse contra las cuerdas, lo que le ha permitido forzar la prórroga tras marchar por detrás en el marcador, y compitiendo hasta el último suspiro. Pero no le ha bastado para derrotar a una Inglaterra, que había perdido sus dos finales anteriores –incluyendo la goleada del 2009 (6-2) ante la propia Alemania– y que también ha reaccionado tras el golpe del empate en el minuto ochenta, siendo mejor en los treinta de añadido.
Quizá fuera un mal augurio el cambio de planes al que se ha visto obligada Martina Voss-Tecklenburg. El infortunio que había acompañado hasta este 2022 a Alex Popp en las Eurocopas –se perdió las dos anteriores por lesión– ha reaparecido para privar de la final a la futbolista que concluye el torneo como máxima realizadora junto a Beth Mead. La capitana alemana ni siquiera ha tenido la posibilidad de disputarla. Confirmada en el once inicial, se ha lesionado durante el calentamiento y ha tenido que seguir el partido desde la grada mientras su vacante la ocupaba Lea Schuller, la futbolista que le había cedido el puesto al dar positivo por covid tras la primera jornada de la fase de grupos y que no lo había recuperado hasta hoy.
Quizá por ese disgusto de última hora o porque Inglaterra no ha querido dar vida a un rival que no necesita ayudas, las alemanas ha comenzado el partido a remolque. Un buen centro de Kirby para el cabezazo de White y una buena acción individual de Mead por la izquierda han podido desequilibrar el choque.
Pero no lo han hecho y el equipo de Voss-Tecklenburg no ha dado ya más cuerda a las inglesas. Con menos brilloque su rival pero con su tenacidad propia se han ido acercando a la portería de Earps para sufrimiento del anfitrión. No ha habido, en cualquier caso, ocasiones claras aunque sí lugar para la polémica, en una acción que ha demostrado –como lo harían después las amarillas perdonadas a Bronze y, habría sido la segunda, Russo– quién jugaba en casa: un córner botado a un área repleta de futbolistas locales que, aún así, ha logrado tocar Hegering y que Earps ha atrapado tras tocar el balón en la mano de Williamson. No lo ha visto Kateryna Monzul en directo y en la sala VOR tampoco han considerado punible la jugada.
Ha respirado Inglaterra que, en un tramo en el que los dos equipos se neutralizaban, ha rozado el gol con una acción entre Mead y White que la delantera del City ha rematado alto.
Al contrario de lo que había sucedido en la primera parte, las alemanas han entrado mejor al campo tras el descanso. Wassmuth, que ha sustituido a Brand, apenas llevaba minuto y medio sobre el verde cuando ha protagonizado una jugada personal que ha silenciado Wembley. Y dos minutos después ha sido Magull la que amagado rematando desde el punto de penalti tras una bonita jugada colectiva de su equipo. Después ha sido Schuller la que ha probado a Earps tras un pase de Wassmuth.
Se ha cumplido un tópico y se ha roto otro. Porque lo ha pagado quien ha perdonado pero, por una vez, ese papel le ha correspondido a Alemania. Su rival ha agradecido los cambios habituales (Toone y Russo por Kirby y White, que Wiegman ha realizado en todos los partidos del torneo) y, con una doble punta en el campo ha complicado la vida a las teutonas.
No ha tardado en llegar el gol, curiosamente cuando Inglaterra sólo tenía diez jugadoras sobre el césped por la lesión de Mead. Golazo, más que gol, porque la contra que ha iniciado Bronze y servido Walsh, la ha culminado Ella Toone con una vaselina espectacular para colocar el 1-0 en el marcador con media hora por delante.
Alemania, tal y como cabía esperar, no se ha quedado de brazos cruzados. Magull ha respondido de inmediato rematando un balón al larguero y, ante un rival que sufría más conforme avanzaban los minutos, la propia jugadora del Bayern ha acertado para restablecer el empate. Llegaba en el ochenta tras una jugada por la derecha que ha abierto Lohman, centrado Wassmuth y rematado con un gran movimiento Magull.
Ha habido nervios de ahí al noventa, con los dos equipos preocupados por no perder y el partido se ha ido a la prórroga. Inglaterra ha sido superior en el tiempo añadido –aunque Russo se ha quedado sin segunda amarila y Bronze sin naranja– y al premio le ha puesto nombre otra futbolista que había salido del banquillo. En el 109, las anfitrionas hanbotado un córner que Bronze remataba de cabeza y Kelly, a la segunda intentona, convertía en el definitivo 2-1 que coronaba a Inglaterra, con total merecimiento, como el mejor equipo de Europa.
FICHA DEL PARTIDO:
Inglaterra: Earps; Bronze, Bright, Williamson, Daly (Greenwood, min.88); Stanway (Jill Scott, min.88), Walsh; Mead (Chloe Kelly, min.63), Kirby (Toone, min.56), Hemp (Parris, min.120); y White (Russo, min.56).
Alemania: Frohms; Gwinn, Hendrich, Hegering (Doorsoun, min.103), Rauch (Lattwein, min.103); Oberdorf, Magull (Dallmann, min.91), Dabritz (Lohmann, min.73); Huth, Schuller (Anyomi, min.67) y Brand (Wassmuth, min.46).
Árbitra: Kateryna Monzul (Ucrania). Amarillas a Stanway (23’), White (24’); Rauch (41’), Oberdorf (57’), Schuller (58’).
Goles: 1-0, min.62: Toone. 1-1, min.80: Magull. 2-1, min.109: Chloe Kelly.
Incidencias: Final de la Eurocopa, disputada en Wembley con 87.192 espectadores en la grada.