La fiesta de Ondarroa y Getaria eclipsa el triunfo de Hondarribia en la clasificatoria
La trainera getariarra se ha colado en la Bandera de La Concha por primera vez en 49 años, un hito histórico como la séptima plaza de Ondarroa, que ha superado en el mano a mano a Cabo, con lo cual las ocho traineras clasificadas provienen de Euskal Herria.
Junto con Donostiarra y en orden estrictamente clasificatorio, Hondarribia, Zierbena, Orio, Getaria, Urdaibai, Kaiku y Ondarroa han metido la proa derechitos a tomar parte en la CXXVII Bandera de La Concha, que ha vivido este miércoles su particular y penitente «regata del miedo».
Una «regata del miedo» tal vez para Urdaibai, ya que el líder de la Liga Eusko Label ha obtenido el quinto mejor tiempo, a menos de tres segundos del octavo lugar, el puesto maldito que ha correspondido para Cabo da Cruz. Y, hablando estrictamente de Urdaibai, a casi 26 segundos de Hondarribia, que ha dado una exhibición, siendo el único bote capaz de romper la barrera de los 20 minutos.
La clasificatoria masculina ha dejado a ocho equipos provenientes de Euskal Herria, con una gran victoria de Getaria, que ha vuelto a los «Juegos Olímpicos del remo» por primera vez después de 49 años de barbecho –con la salvedad de la clasificación conjunta con Zumaia de 2001–, mientras que la «Antiguako Ama» de Ondarroa, un año después de haber ocupado la octava plaza. De las 23 apariciones de Ondarroa en la clasificatoria, la «Antiguako Ama» ha sumado su quinta clasificación para la bandera más importante de la temporada.
Trámite y euforia
Ya desde el primer momento, el puerto de Donostia ha congregado a un buen número de aficionados, después de dos años de prohibición de público. Todavía ha habido vallas que han impedido el «contacto piel con piel», pero al final no ha faltado ambiente, sobre todo con los colores de Ondarroa y Getaria poniéndole decibelios a la llegada a puerto de sus remeros. Y si bien se han echado de menos los abrazos, no ha faltado comunión entre las gentes de mar y de secano.
Hondarribia y Orio han celebrado la clasificatoria como un trámite cumplido. Sobre todo la «Ama Guadalupekoa» ha destrozado todos los registros, así en el largo de ida como en la empopada, mientras que Orio, que ha bogado en segundo lugar solo por detrás de Isuntza, ha ido buscando sus propias referencias, a sabiendas de que esta campaña sus mejores regatas han llegado contra el crono y limitándose a hacer las cosas con solvencia.
Urdaibai ha respirado con alivio, ya que no ha sido su mejor día, aun a cuenta de algunos cambios que la "Bou Bizkaia" ha podido realizar en su tripulación. «Ha sido un día desagradable, y aunque lejos de los mejores, estamos adentro», ha reconocido el remero Jon Unanue. «No ha sido nuestro mejor día, y aunque para la bandera no cuenten los tiempos, siempre prefieres estar por delante. No hemos estado cómodos en ningún momento y ni en la vuelta hemos aprovechado las olas. En todo caso, estamos adentro y el domingo vendremos a hacer un buen trabajo», ha insistido.
Por ello, el remero de Hondarribia Manex Alday no le ha dado mayor importancia a los casi 26 segundos de diferencia respecto de la ˝Ama Guadalupekoa" sobre Bermeo. «A saber qué cambios habrá hecho. Respeto mucho a Urdaibai y el domingo será otra historia. Nosotros nos hemos encontrado muy bien y hemos hecho las cosas bien hechas. No nos hemos guardado nada, porque no creo que este sea un día de andar guardándose cosas, sobre todo porque hacer una buena clasificatoria otorga mucha confianza», ha explicado el remero «vikingo».
Lo cierto es que Hondarribia ha aventajado en casi 17 segundos al segundo clasificado Zierbena, mientras que la diferencia entre los «galipos» y Cabo ha habido 12 segundos, mientras que entre la quinta plaza de Urdaibai y la séptima de Ondarroa solo ha habido 38 centésimas, con el propio bote de Getaria sabiéndose casi adentro antes de culminar la regata del grupo A.
Evidentemente, las reacciones de las traineras que no están acostumbradas a meterse en La Concha han sido otras. Iñaki Errasti, remero y entrenador de Ondarroa, ha controlado toda euforia adentro del bote, recortando su adusto rictus a bordo de la «Antiguako Ama» como si de un marino rescatado de las pinturas de Ignacio Zuloaga fuera, «embridando» en cierto sentido la necesidad de celebrar el séptimo lugar que ha ido sintiendo el resto de la tripulación. Solo al ver que la trainera asturiana de Castropol, la última en saltar a la mar, no ha sido capaz de igualar su registro, ha dejado desatar su euforia, y solo entonces han saltado de alegrtía también sus muchachos.
«Ha habido años en los que pensábamos que nos podíamos meter y no ha sido0 así, y este año, con menos esperanzas que traíamos, lo hemos logrado», ha explicado a su vez el patrón de Ondarroa Iñigo Larrinaga. «Las cosas han ido muy justas en las referencias con Cabo y Kaiku, a veces a favor y otras en contra. Pero al final, esto es maravilloso para clubes como nosotros o la propia Getaria, porque no estamos acostumbrados a estar en La Concha y es algo increíble», ha añadido.
Iñaki Errasti, liberado de su hieratismo dramático, también ha dejado correr su alegría. «Debíamos hacer las coas muy bien para tener opciones y así ha sido», ha sentenciado. «Ha sido un disfrute esta regata y espero que nuestros aficionados disfruten de los dos próximos domingos. Ya en 2019, la última edición con público, nos metimos en La Concha y ahora que vuelve la gente, nos volvemos a meter. Esto debe servir para que la gente disfrute», ha declarado.
Mientras, en lo secano, el presidente de Getaria a duras penas ha contenido las lágrimas. «Quisiera dedicar esta clasificación a aquellos que lo consiguieron en 1973», ha balbuceado Xabier Goikoetxea. Mientras, desde las tostas, el remero Unax Eizagirre ha reconocido que «sabíamos que de hacer una buena regata estábamos adentro, pero esa presión nos han afectado mucho antes de meternos al agua. Pero las cosas han ido bien desde el principio y hemos disfrutado un montón», ha explicado, dedicando a todo el pueblo de Getaria esta histórica clasificación.
Antes de nada, los jueces han determinado que, en caso de tormenta eléctrica, la regata va a quedar suspendida al momento. Viendo la panza de burro del cielo sobre el Mar Cantábrico, como para echarse a temblar, como ante una mar un poco más movida de lo que se esperaba, aunque sin exagerar. No han llegado rayos ni centellas ni la sangre al río, y sí en cambio un tremendo espectáculo.
Después de la tensión y la liberación de la regata, ha llegado el momento del sorteo de tandas en el ayuntamiento. Ahí las manos inocentes han decidido que Kaiku, Getaria, Hondarribia y Orio bogarán en la primera tanda, mientras que, junto con la trainera «anfitriona» de Donostiarra, acompañará a Ondarroa, Zierbena y Urdaibai en la segunda.
Clasificatoria masculina:
1-Hondarribia 19:43.72
2-Zierbena 20:00.26
3-Orio 20:02.74
4-Getaria 20:05.56
5-Urdaibai 20:09.58
6-Kaiku 20:09.84
7-Ondarroa 20:09.96
8-Cabo 20:12.06
9-Lekittarra 20:20.72
10-Ares 20:28.34
11-Bueu 20:37.70
12-Meira 20:38.44
13-San Pedro 20:39.08
14-San Juan 20:50.20
15-Zarautz 20:56.42
16-Pedreña 20:57.02
17-Arkote 21:05.60
18-Zumaia 21:10.92
19-Lapurdi 21:21.16
20-Castropol 21:29.82
21-Deustu 21:29.82
22-Castro 21:45.72
23-Hibaika 21:56.96
24-Mutriku 22:06.66