«La txapela es gasolina para tirar adelante, pero esta final ha supuesto mucho esfuerzo»

Pocas horas después de calarse, y de celebrar como merecía, su octava txapela del Individual de remonte, Javi Urriza nos atendió mientras preparaba las maletas para viajar a la República Checa, donde ya está y pasará toda la semana debido a su profesión como Ingeniero de diseño en una empresa.

¿Cómo se levanta uno con la octava txapela?

Jodido pero contento. Fue un partido muy duro, mucha tensión como todas las finales y al final se decidió por pequeños detalles. Me pareció que a la mitad hubo menos ritmo, no tanto peloteo, pero al final, estos partidos tan importantes con tanta tensión te dejan el cuerpo reventado. Luego hubo que celebrarlo a tope porque la ocasión la merecía y estamos jodidos pero contentos.

Se le vio celebrar el triunfo con rabia, ¿quizá la vez que más?

Quería demostrar que todavía puedo ser competitivo, en parte también demostrármelo a mí mismo, porque, la verdad, no lo tenía nada claro. Es un campeonato muy complicado de ganarlo y ha habido que trabajarlo muy duro, ha habido muchos contratiempos durante el campeonato y la verdad que recuperar la txapela del año pasado ha sido un subidón grande.

Tras un año redondo, ya en sanfermines se comenzó a torcer con aquella lesión.

Llevo dos o tres años increíbles en cuanto a resultados pero es verdad que, con 40 años y muchos kilómetros al cuerpo, al final empiezan a salir goterillas y hay que seleccionar un poco los esfuerzos de alguna manera. Ha habido contratiempos, molestias en el hombro previas al campeonato, que me pegué una buena temporada y tuve que parar. Luego en el campeonato el pelotazo en la muñeca que me ha dado muchísima guerra y luego la fuerte distensión que tuve en el isquio. Si no hubiera sido por eso, había sido el subidón igual, pero la verdad es que ha sido muy complicado física y mentalmente. Esto te da gasolina para tirar para adelante, pero esta final ha supuesto un esfuerzo muy importante.

Y aunque desde fuera se le vea ganar fácil, hace falta mucha gasolina...

Atrás hay mucho trabajo y conforme vas para arriba, con los años al final hay que dedicarle todavía más tiempo a nivel físico, de preparación, para tratar se seguir siendo competitivo. Y debo compatibilizarlo con mi vida laboral y al final a veces tienes que privarte de cosas. Es duro y satisfactorio a la vez, pero cuando sale todo bien, es muy bonito.

Desde el lunes le toca trabajar en la República Checa.

La verdad es que yo soy un privilegiado, porque al final hago el deporte que me gusta y tenemos un rendimiento económico. Ojalá pudiéramos dedicarnos a full, como un futbolista, pero que te paguen por hacer algo que te gusta y todo el reconocimiento que te llevas es grande. Y además mi trabajo es una pasión, tengo la suerte de trabajar en algo que me gusta, viajar también me gusta pero la verdad es que compaginarlo todo es duro y complicado.

Dejó la incógnita de si defenderá txapela el año que viene, quiere tomarse su tiempo antes de decidir.

Creo que ese tipo de cosas hay que pensarlas en frío, lo del sábado fue un subidón muy grande, pero como te digo, hay mucho trabajo detrás y la verdad es que no lo sé, no tengo una decisión tomada. El corazón me dice una cosa y la cabeza otra. Si estoy es porque quiero pelear por todo y seguir siendo competitivo, para eso hay que estar dispuesto a seguir haciendo sacrificios y dedicarle muchas horas y tengo que ver si encuentro esa motivación o, por otro lado, el cuerpo me dice que ya vale.

Es el mayor referente actual del remonte. ¿Es una presión extra para seguir?

No para nada, al final, por suerte, en el remonte vienen auténticos fenómenos como son los Ansa, Barrrentxea y el resto de jóvenes que vienen por detrás, y nadie es imprescindible. Además no estoy pensando en una retirada tampoco, seguiría jugando por parejas pero me tengo que pensar si me aventuro a jugar oro individual con todo lo que eso conlleva.

¿Cómo ve la situación del remonte? ¿Ha llegado el escaparate televisivo y quizá el panorama es algo menos negro?

Sí, sin duda, yo creo que la pandemia fue un punto de inflexión para la modalidad. En ese momento surgió la posibilidad de jugar partidos con ETB en directo, fue un grandísimo escaparate y además se están haciendo muy bien las cosas. La televisión está teniendo gran respuesta de audiencias y la gente que viene al frontón disfruta muchísimo. Creo que se están dando pequeños pasitos pero constantes para que la salud del remonte mejore. Hay que seguir trabajando con la gente joven, que salgan nuevas figuras para que traigan aire fresco.

En su día también se apostó por jugar menos partidos pero elegidos y parece que la fórmula funciona.

Sí. Al final nosotros, por preferir, siempre queremos jugar muchos partidos pero sí que es verdad que dar una excesiva oferta al espectador hace que al final no haya tanto interés. Los campeonatos enganchan y la empresa lo que ha decidido es que prácticamente el 90% de los partidos que se juegan en Gallareta formen parte de algún campeonato. Ahora estaremos cerrados hasta octubre, cuando empiece el Parejas, que es una competición que engancha mucho a la gente. La verdad es que ha habido muy buenas entradas en semifinales y la final y la gente disfruta. La modalidad engancha, tanto en directo como por la televisión, y eso es una muy buena noticia. Yo creo que en directo siempre ha enganchado pero en la televisión se está consiguiendo que sea un deporte bonito de ver, la gente se engancha y es una muy buena noticia para la modalidad.