Al menos cuatro muertos por disparos en Irán en las protestas por la muerte de Mahsa Amini
Al menos cuatro personas han muerto por disparos de la Policía iraní con munición real en las protestas por la muerte de la joven kurda Masha Amini en una comisaría, que han tenido lugar sobre todo en el Kurdistán iraní, pero también en Teherán.
Al menos cuatro personas han muerto y 75 más han resultado heridas este lunes por disparos con munición real de las fuerzas de seguridad iraníes durante los disturbios y protestas desatados por la muerte de una mujer kurda Mahsa Amini, poco después de ser detenida en Teherán por no llevar bien puesto el velo islámico o hiyab.
Los incidentes se han concentrado en la región del Kurdistán iraní (Kurdistán este-Rojhilat), según ha informado la organización de Derechos Humanos Hengaw.
Dos de los fallecidos corresponden a la ciudad de Saghez, de donde era originaria Amini. En esa localidad se han contabilizado al menos 17 heridos más. En Divandarré habría otros dos fallecidos y quince heridos. En esta localidad se han producido graves incidentes. También hay heridos en Mahabad (trece), Buchan (siete), Kamiyaran (cuatro), Bijar (siete), Baneh (cuatro) y Takab (cuatro).
Entre los heridos hay una niña de diez años que estaría hospitalizada con pronóstico crítico tras recibir un disparo en la cabeza en la localidad de Bukan, según informa Hengaw y recoge la televisión kurdo-iraquí Rudaw.
En Saghez, donde fue enterrada Amini el sábado, «la atmósfera es la de una ley marcial no declarada», ha explicado Bajtian Joshnam, director de la agencia de noticias Mokrian, con sede en Saghez, en declaraciones a Radio Farda.
«Hay fuerzas de seguridad por todas partes. Hay policías. Las tiendas están completamente cerradas e incluso los organismos oficiales están cerrados desde mediodía», ha apuntado.
Los partidos kurdos iraníes habían convocado para este lunes una huelga general en Rojhelat en protesta por la muerte de Amini.
También hay noticias de protestas en la capital iraní, Teherán, donde según los vídeos difundidos se han coreado consignas como «¡Muerte al dictador» o «¡Mujer, vida y libertad!».
Ha habido concentraciones en la Universidad de Teherán, en la Universidad de Beheshti y en la Universidad de Alamé.
En algunas protestas, las mujeres se han quitado o quemado los hiyab como denuncia de la persecución del régimen teocrático iraní.
La Policía defiende su actuación
Frente a la conmoción e indignación por esta muerte en comisaría, donde la joven fue detenida para ser «reeducada», la Policía de Teherán ha eludido cualquier autocrítica y aseguró que la muerte de Amini fue un «incidente desafortunado que deseamos que no se repita».
El comandante Sardar Hosein Rahimi defendió que la Policía de la Moral que detuvo a Amini «lleva a cabo un trabajo positivo» y lamentó que «se hayan vertido acusaciones deshonestas contra la Policía».
Rahimi reconoció que la mujer fue detenida por su vestimenta y que «no hubo disputas o resistencia durante su traslado». «Según otras personas, hizo bromas dentro de la furgoneta» policial, apuntó en rueda de prensa.
En este sentido, ha hecho hincapié en que «no hubo negligencia por parte de la Policía, ni siquiera un pequeño desliz. Las declaraciones publicadas en el ciberespacio sobre la causa de la muerte son mentiras», ha dicho, antes de pedir a la población «no prestar atención a los rumores».
El padre desmiente a la Policía
Sin embargo, el padre de Amini, Amyad Amini, ha asegurado en declaraciones a Rudaw que los vídeos en los que aparece supuestamente su hija desmayada son «mentiras» y «censura», ya que Amini fue golpeada por los agentes.
«No estaba enferma, como dice la televisión iraní», ha afirmado Amyad Amini, quien asegura que las autoridades se han negado a entregarle la autopsia de su hija. «Fue golpeada dentro del vehículo policial y en la comisaría, pero no quieren publicar la grabación de las cámaras de seguridad», ha añadido.
«No está claro cómo la golpearon. Las mujeres que estaban en la ambulancia dicen que tenía un golpe en la cabeza», ha explicado. Además la familia ha pedido que un perito examine el cuerpo de la chica, sin que les dieran respuesta alguna, ha explicado.
Aunque no se trata del primer caso similar, la reacción popular ha obligado al presidente iraní, Ebrahim Raisi, a reaccionar y el domingo habló por teléfono con la familia prometiendo una investigación minuciosa para esclarecer lo ocurrido.
«Le dije al presidente Ebrahim Raisi que la grabación mostrada en la televisión nacional no eran más que mentiras, que estaba censurado», ha apuntado Amyad Amini.
«Clase de educación»
Amini fue detenida en Teherán cuando estaba con su hermano por llevar de forma «inadecuada» el hiyab. Fue trasladada a una sede de la Policía de la Moral para «una clase de educación y orientación».
Tras dos horas de espera frente a la comisaría de la Policía de la Moral, su hermano descubrió que la mujer había sido trasladada en ambulancia a un hospital. En ese tiempo él y otros testigos pudieron escuchar gritos y varias mujeres que salieron del lugar dijeron que «han matado a alguien».