Lágrimas tras 47 años de retraso para quitar a Franco la Medalla del Trabajo
El Gobierno español ha anunciado la retirada de la Medalla del Trabajo al dictador Francisco Franco a pocas semanas de que se cumplan 47 años de su muerte en la cama. La encargada de verbalizar ha sido la vicepresidenta Yolanda Díaz, entre lágrimas y disculpas.
La vicepresidenta segunda del Gobierno español y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha anunciado este jueves la retirada inmediata de la medalla al mérito del Trabajo al dictador Francisco Franco y a otros colaboradores de la represión franquista.
En una rueda de prensa, y visiblemente emocionada, Díaz ha pedido «disculpas» por el tiempo tardado en retirar estas condecoraciones de un «libro de la infamia» a personas con las «manos manchadas de sangre».
«Nunca más», ha añadido Díaz.
Entre la lista de esta primera tanda de medallas retiradas este mismo jueves a miembros del aparato represor franquista, está José Antonio Girón de Velasco, Juan Yagüe, José Luis Arrese, José Solís Ruiz o el cardenal Enrique Plaid, entre otros, según ha citado Díaz.
El Consejo de Ministros aprobó el pasado mes de febrero un nuevo reglamento de la Medalla y la Placa al Mérito en el Trabajo para permitir, entre otros cambios, retirar las otorgadas a colaboradores de la represión franquista.
La norma permite retirar las medallas «cuando quede acreditado que la conducta y trayectoria de la persona o entidad condecorada sea incompatible con la ejemplaridad cívica y profesional exigida para la obtención del galardón».
También, especifican, cuando la persona beneficiaria, «antes o después de la concesión, hubiese formado parte del aparato de represión de la dictadura franquista y hubiera cometido actos u observado conductas manifiestamente incompatibles con los valores democráticos y los principios rectores de protección de los derechos humanos».
Estas condecoraciones se crearon en 1926, desaparecieron durante la Segunda República, se reinstauraron en la dictadura y su última regulación databa de 1982.
La nueva regulación adapta la norma a la legislación vigente en materia de memoria histórica, particularmente en relación con los derechos de las víctimas de la dictadura y permitirá que se pueda otorgar a título póstumo.