Max Verstappen es el principal beneficiado del loco y accidentado Gran Premio de Australia

El neerlandés de Red Bull ha sumado su segunda victoria de la campaña y ha reforzado su liderato, después de una carrera con tres parones y doble bandera roja. Los veteranos Lewis Hamilton y Fernando Alonso han completado respectivamente el podio.

El neerlandés Max Verstappen (Red Bull) ha reforzado su liderato en el Mundial de Fórmula Uno al ganar este domingo el alocado Gran Premio de Australia, una prueba que se ha visto tres veces interrumpida, con doble bandera roja en el circuito de Albert Park de Melbourne.

Verstappen, de 25 años, ha logrado su trigésima séptima victoria en la F1, la segunda de la temporada y la primera en Australia, al ganar por delante del inglés Lewis Hamilton (Mercedes) y de Fernando Alonso (Aston Martin), respectivamente. Mientras, la otra cara de la moneda ha vuelto a ser para Ferrari, que ha vivido una jornada para el olvido al comenzar con la retirada, por accidente en la primera curva, del monegasco Charles Leclerc; y que se ha complicado aún más con el muy loco desenlace -con dos banderas rojas seguidas cuando quedaban tres de las 58 vueltas previstas-. El español Carlos Sainz, que ha tenido opción de acabar cuarto o mejor, ha sido sancionado con cinco segundos por tocar en la segunda re-salida a Fernando Alonso, al que ha sacado de la pista. Después, completamente frustrado, Sainz ha acabado el duodécimo, fuera de los puntos.

Una vez acabada la carrera, Verstappen se ha mostrado «contento por la victoria», pero ha apuntado que ha resultado «una carrera difícil», cuestionando la necesidad de la penúltima bandera roja, decretada por la pérdida de un neumático del Haas del danés Kevin Magnussen a falta de tres vueltas.

Lo que sí que ha quedado claro es que Red Bull y Verstappen son, en estos momentos, el equipo y el piloto a batir. Y que el espectacular progreso de Aston Martin, el séptimo coche el año pasado, es una realidad.

«Mad Max» lidera ahora la clasificaciñon de pilotos con 69 puntos, 15 más que su compañero de escudería «Checo» Pérez y con 24 puntos sobre Fernando Alonso, que sigue sin bajarse del podio en este arranque de temporada. Red Bull también encabeza, con claridad, la clasificación de constructores, en la que suma 123 puntos, 58 más que el nuevo equipo de Alonso; y con 67 sobre Mercedes.

Mil carreras en la carrera

Russell y Hamilton han efectuado una salida espectacular, rebasando a Verstappen antes de la primera curva, en la que, después de tocarse con el francés Esteban Ocon, Leclerc se ha salido de pista, teniendo que abandonar; en una acción que ha provocado la primera entrada del coche de seguridad.

A diferencia de los días previos, ha lucido de nuevo el sol en Albert Park, que ha registrado su récord de asistencia –444.000 espectadores durante los tres días del Gran Premio–. Ha sido también una jornada en la que el debutante australiano Oscar Piastri (McLaren) ha sumado ante su afición sus primeros puntos en la categoría reina.

En la octava de las 58 vueltas ha vueltoi a entrar en pista el «safety car»«, como consecuencia del accidente de Albon en la séptima de las catorce curvas. Russell, cediendo el liderato, y Sainz han parado, justo antes de que se decretase la primera bandera roja, algo que ha perjudicado notablemente a ambos.

La carrera se ha reanudado desde la parrilla, en la que han ocupado los tres primeros puestos Hamilton, Verstappen y Alonso, en la tercera plaza provisional. Los tres han mantenido puesto en la resalida; pero poco después, en la primera zona de DRS, «Mad Max» se ha tomado la revancha, rebasando de forma inapelable a Hamilton.

La bandera roja ha beneficiado, obviamente, a los que no han parado justo con la entrada del segundo «safety», por lo que han podido cambiar neumáticos durante la interrupción; antes de que todos retomasen la prueba con las gomas duras.

Verstappen ha parecido liderar silbando traspasado el ecuador, con ocho segundo sobre Hamilton y casi diez sobre Alonso, intentando gestionar de la mejor forma posible el neumático duro con el que todos aspiraban a llegar a meta.

A cuatro giros para el final, el accidente del danés Kevin Magnussen, que perdió una rueda de su Haas, ha provocado la entrada de un nuevo coche de seguridad. Tan solo unos instantes antes de que la dirección de carrera haya dictaminado una segunda bandera roja y se haya generado un caos descomunal en el circuito de la capital de Victoria.

Desmadre a la australiana

Una prueba prevista a 58 y casi resuelta casi se ha decidido, después del giro de formación, a solo dos vueltas. Con el pelotón de nuevo compactado en parrilla y todos con neumáticos blandos.

Como era de esperar, la oportunidad invita al riesgo; y mientras que Verstappen y Hamilton han mantenido sus puestos, Sainz, al intentar pasar a Alonso, ha tocado el Aston Martin del asturiano, que se ha salido, bajando provisionalmente al undécimo puesto.

Como quiera que no ha sido el único percance, se ha decretado inmediatamente otra bandera roja. Y durante unos momentos la desorientación ha sido tremenda en Melbourne.

Al fin se ha decidido reanudar la prueba, los doce coches que aún seguían en la misma, por detrás del coche de seguridad y con la posición que tenían antes de que en Albert Park se generase el desmadre a la australiana, con cinco segundos de sanción para Sainz, dejando el podio expedito para Verstappen, Hamilton y Alonso.

Todos los tiempos y clasificaciones se pueden consultar en la página especial de NAIZ sobre la Fórmula 1.