«Apoyaremos a la fuerza progresista que logre el mayor consenso social en Iruñea»

Koldo Martínez, senador autonómico, encabeza la lista de Geroa Bai al Ayuntamiento de Iruñea y anuncia que tras las elecciones su formación apoyará al «grupo progresista que más consenso social genere».

-Se presenta usted como candidato de Geroa Bai a las municipales de Iruñea tras un paso por el Senado que todavía deberá prorrogarse varios meses.

-Efectivamente. Suelen decir que «de Madrid al Cielo», pues yo vengo al Cielo de Pamplona. Estoy encantado con el reto y con el trabajo que voy a tener por delante.

-¿Con qué perspectivas se presenta a estos comicios?

-Me presento al frente de una lista en la que estamos convencidos de que podemos conseguir la Alcaldía de Iruñea. Porque Geroa Bai ha hecho siempre, y esta vez también lo vamos a hacer y en el futuro también, eso de apostar por gobiernos progresistas y plurales. Lógicamente, tienen que ser gobiernos nacidos del acuerdo. Y en Iruñea vamos a apostar, como lo hemos hecho siempre, por el grupo progresista que más consenso social genere.

-¿Qué significa exactamente consenso social? ¿No tiene que ser el más votado?

-No tiene que ser el más votado, efectivamente. El grupo más votado puede ser UPN, que no es precisamente un grupo progresista. No fue capaz de generar el consenso social suficiente. Nosotros vamos a apostar por gobiernos progresistas plurales, que estén liderados por el grupo político que más consenso social genere.

-En cualquier caso, tras las elecciones se abre un abanico de expectativas. ¿Priorizan alguna?

-Priorizamos la voz de la ciudadanía. El 28 de mayo, la ciudadanía de Iruñea hablará y con base en esos datos apoyaremos, insisto, un gobierno progresista y plural.

-Los acuerdos son importantes para conformar mayorías, pero me imagino que tendrán que estar sustentados en un programa. ¿Qué es lo que consideran imprescindible en ese acuerdo?

-Tengo la sensación de que las fuerzas progresistas estamos diciendo y proponiendo las mismas cosas. Los grandes titulares son que queremos una ciudad más habitable, más paseable, con movilidad sostenible, con un desarrollo sostenible, cohesionada (algo que para nosotros es fundamental) y que responda no a los deseos o intereses de los grupos políticos, sino a los intereses y necesidades de verdad de la ciudadanía de Pamplona. Queremos una Iruñea donde todos y todas podamos ser felices. Seamos menores, jóvenes, personas adultas o más mayores, como el grupo de mi edad por ejemplo.

-¿Qué balance hace de la gestión de los últimos cuatro años de Enrique Maya? ¿Poco consenso ha habido, no?

-Consenso yo diría que ninguno. Los cuatros años del alcalde Maya han sido de una parálisis total. Había un grupo que se llamaba Parálisis Permanente, que a mí me gustaba mucho y que podría encajar en esta definición. Sobre todo, han sido cuatro años de una cerrazón absoluta a los movimientos vecinales, a los grupos culturales, a los barrios. Esto es lo primero que haré cuando tenga la Alcaldía, abrir las puertas del Ayuntamiento y escucha activa con la ciudadanía. No solo escucha activa, sino conversación empática y comprometida. Dicho esto, quiero recordar algo que parece que a la gente se le olvida, pero es que Maya ha sido alcalde durante estos cuatro años porque el PSN en 2019 se votó a sí mismo y permitió que el Ayuntamiento de Pamplona haya estado en manos de la derecha.

-¿El objetivo es ahora traer al PSN a ese consenso?

-Claro. En 2015, Geroa Bai consiguió el Gobierno del Cambio en Navarra. Tuvimos una oposición frontal y brutal por parte del PSN. En algunos sitios he dicho que fue incluso más brutal que la oposición de la derecha. En 2019, hemos conseguido que el PSN se haya venido hacia nosotros y esté más cerca de nosotros que lo que estaba en 2015. Lógicamente, nuestra apuesta es también conseguir lo mismo, que el PSN abandone esa política de «o yo o el caos» y se sume al resto de fuerzas progresistas para que tengamos en Iruñea un alcalde progresista.

-¿Le falta un paso al PSN? Es verdad que le dio la Alcaldía a la derecha en 2019, pero en los últimos años de la legislatura han actuado con EH Bildu y Geroa Bai conjuntamente marcando férreamente al equipo de gobierno de Maya. ¿Le falta ese último paso?

-Es verdad que el PSN a mitad de legislatura cambió, pero es que en medio hubo una comida o una cena en Madrid entre el PSN y UPN que parecía que podía cambiar muchas cosas. El voto en contra de la reforma laboral de dos diputados de UPN fustró aquella operación. El PSN parece que se sintió traicionado y se enfadó mucho con los que hasta ese momento estaban siendo sus socios y se sumó al bloque progresistas. Bienvenidos sean, aunque sea porque alguien les hizo esa jugarreta.

-Esa operación también supuso la división de la derecha, lo que abre unas perspectivas interesantes en Iruñea.

-Sí, esa operación ha supuesto la división de la derecha, que no es solo una división. No hay más que escuchar las cosas que se están diciendo entre ellos. Es algo terrible. Bienvenida sea también la división de la derecha porque consideramos que va a favorecer o va a permitir que los grupos progresistas tengamos más fácil, si somos capaces de unirnos, el acceso a la Alcaldía de Iruñea.

-Al final, hablamos de Iruñea pero podríamos hablar de más ayuntamientos. Ha propuesta la creación de un foro, más allá de lo que es la Mancomunidad de Iruñerria, para coordinar la comarca.

-La jugarreta del PSN de autovotarse en 2019 no solo se dio en Iruñea, se dio también en muchos ayuntamientos de la comarca. Al autovotarse permitió que gobernase la derecha. Creo que hay problemas que tiene Pamplona que son exactamente iguales o muy parecidos a los que tiene Burlada.

-Se ha visto con las bicis de alquiler.

-Por ejemplo, el tema de las bicis eléctricas. Una de las primeras intervenciones que tuve, luego ya se lo he escuchado a todo el mundo, fue decir que a problemas comunes de los ayuntamientos de la comarca, de Iruñerria, de eso que a mí me gusta llamar la Metrópoli Foral (aunque los de Euskalerria Irratia me acusen de haberles robado el nombre, lo que es verdad), hay que intentar dar soluciones comunes. Sé que no es fácil. Es mucho más fácil que hacerlo. Pasa siempre en política, es más fácil prometer que hacer. Pero este es uno de nuestros compromisos: a problemas comunes en Iruñerria, búsqueda de soluciones comunes. Para eso también necesitaremos más acuerdos.