Sánchez despacha rápido la reunión con Feijóo, que le pide dos años en Moncloa
La reunión entre Alberto Núñez Feijóo y Pedro Sánchez no ha traído más que sucesión de fuegos artificiales. Mientras este último la ha despachado rápido e instándole a desbloquear el CGJP, el lider del PP le ha planteado que se abstenga para dejarle dos años en Moncloa, pero ha admitido su fracaso.
La ronda de contactos de Alberto Núñez Feijóo (PP) para intentar su investidura a finales de setiembre ha arrancado este miércoles con una reunión con el que precisamente es su rival en ese proceso, Pedro Sánchez (PSOE). De entrada ha resultado significativo que Sánchez convocara una reunión de la Ejecutiva del PSOE apenas una hora después en Ferraz, con lo que la reunión ha tenido escasa duración.
El cara a cara, precedido por las acusaciones diarias de Feijóo a Sánchez de «cesiones» a sus socios, no permitía atisbar ningún acuerdo. De hecho, desde el PP no se estaba apelando realmente a Sánchez para que se abstenga, sino a diputados del PSOE para que se desmarquen y faciliten al candidato nombrado por el rey bien los cuatro votos a favor o las siete abstenciones que requiere para llegar a La Moncloa.
El «caramelo» del candidato del PP al del PSOE ha tomado esta forma: le pide que facilite su investidura para una legislatura de dos años, afrontar en ese tiempo hasta seis «pactos de estado» y después convocar elecciones. Pero nada más salir, Feijóo ha asumido lo baldío de su intento: «Desgraciadamente no quiere un acuerdo entre partidos constitucionalistas», ha dicho de modo lacónico.
«El PSOE ha podido escoger pero su pretensión es buscar encaje a las exigencias parciales de los partidos minoritarios que no respetan la Constitución. Prefiere pactar con los independentistas, negociar amnistías, referendos y grupos parlamentarios que no cumplen y desigualdades financieras entre territorios», ha añadido.
A partir de ahí, un reproche igualmente estéril: «Siento tener que recordárselo al secretario general del PSOE, pero el Partido Popular ganó las elecciones y el Partido Socialista es la segunda fuerza».
Por su parte, el presidente español en funciones ha aprovechado la reunión para reclamar al líder del PP un «compromiso formal» de desencallar, antes del 31 de diciembre, la renovación del Consejo General del Poder Judicial, que la derecha bloquea hace cuatro años y medio ya. Luego se ha ido a la reunión de su partido sin comparecer ante los medios. Ha sido el PSOE quien le dado réplica a Feijóo con un rotundo no.
Mensaje de Urkullu
Feijóo seguirá ahora su ronda con fuerzas como Junts o PNV. Solo deja fuera a EH Bildu. También intentará hablar con presidentes autonómicos (la mayoría de su partido), aunque ya ha recibido el portazo del president de la Generalitat mientras que Iñigo Urkullu solo está dispuesto a hablar por teléfono.
Al respecto, Núñez Feijóo se ha mostrado algo molesto en su comparecencia por las informaciones que aseguraban que el lehendakari de la CAV no quiere hablar con él. Ha explicado que recibió el martes un wathapp de Urkullu ofreciéndole llamarle este miércoles «entre 5 y media y 6 y media», lo que piensa hacer Feijóo. Y además ha querido apostillar que no le respondió el mismo día porque tenía muchos mensajes almacenados y no lo vio.
Los seis «pactos de Estado»
El PP ha explicitado los seis pactos propuestos, intentando así dar el máximo contenido y credibilidad a su propuesta, y tomar la iniciativa.
Antes que nada, el Ejecutivo propuesto, que estaría compuesto por 15 ministerios, se comprometería a «defender la integridad territorial de la Nación española» y rechazaría las solicitudes de referéndum y de amnistía expresadas por los partidos independentistas.
En cuanta a las seis propuestas de acuerdos, el Pacto de Regeneración Democrática propuesto por Feijóo estaría enfocado en mejorar «la calidad» de la democracia, «preservando la división de poderes» así como «la independencia de los organismos de control», entre los que se incluye el Consejo General del Poder Judicial.
El Pacto por el Estado de Bienestar trataría de «garantizar la viabilidad del Sistema Nacional de Salud, la estabilidad y calidad del sistema educativo, la igualdad entre mujeres y hombres y la viabilidad de las pensiones para los mayores», incluyendo únicamente «su revalorización anual».
También figura un Pacto por el Saneamiento Económico. Este se llevaría a cabo para «la solvencia de los más vulnerables y de la clase media» y buscar «un camino más próspero» para la juventud, todo ello aprovechando los fondos europeos «con la mayor agilidad, eficacia y transparencia posible».
Le sigue un Pacto por las Familias que les permita tener mayor capacidad «para lo prioritario» y hacer posible la conciliación, todo ello negociando con agentes sociales y económicos para garantizar «nuevas fórmulas de compatibilización la vida laboral y familiar».
También se trabajaría en un Pacto Nacional del Agua para alcanzar una propuesta que garantice «el acceso a este recurso básico, en el momento actual y ante el previsible agravamiento derivado del cambio climático».
La última de las propuestas, el Pacto Territorial, tendría su comisión en el Senado y buscaría convertir la Cámara Alta en «una verdadera Cámara de representación territorial», «fortalecer la España de las Autonomías» e introducir un nuevo método de financiación.
El PSOE, con ironía
Sánchez ha dejado la respuesta a Feijóo en manos de la portavoz del PSOE, Pilar Alegría, que ha pasado factura a las críticas e insultos del PP.
Tras dejar claro que votarán no a su intento de investidura, ha atribuido esta maniobra a un único objetivo por parte del líder gallego: «Salvar su pellejo». Y ha bromeado con que Feijóo ha pasado de querer «derogar el sanchismo» a «rogar al sanchismo».
«La Comisión Ejecutiva Federal ha adoptado una decisión y es que el Partido Socialista no va a apoyar la investidura del señor Feijóo», ha declarado Alegría en la rueda de prensa posterior a la Ejecutiva Federal del PSOE.
Sobre las propuestas de pactos de Estado, el PSOE insta a Feijóo a «cumplir la Constitución primero» resolviendo el bloqueo de los órgano de gobierno judiciales.