UPN ve a Sánchez convencido de gobernar y ERC define sus condiciones como «razonables»

El diputado de UPN, Alberto Catalán, le ha trasladado al presidente en funciones, Pedro Sánchez, que votará en contra de su investidura centrando su discurso en el «blanqueamiento» de EH Bildu y «la traición» que supondría la amnistía a los líderes catalanes.

En el encuentro que ha mantenido este miércoles con Pedro Sánchez en el Congreso, el representante de UPN Alberto Catalán le ha confirmado al jefe del Ejecutivo que votará «no» a su investidura, al considerar que el Estado español «no puede ser gobernada por aquellos que quieren acabar con ella ni depender del independentismo más radical».

UPN advierte de que la amnistía que el independentismo catalán pide a Sánchez implicaría «eliminar el delito de quienes dieron un golpe en Catalunya» y supondría «una traición a la Constitución» y una «humillación» al sistema democrático y al «principio de igualdad entre españoles».

Del encuentro, Catalán se lleva la «impresión personal» de que Sánchez está «muy tranquilo» respecto a sus posibilidades de formar gobierno. Por otra parte, el partido navarro ha trasladado que estará «atento» a «cualquier concesión» a EH Bildu, del que afirma que «no da nada gratis y acaba tarde o temprano exigiendo el pago correspondiente». Para UPN es «una aberración» que Sánchez se reúna el viernes con la portavoz parlamentaria de EH Bildu, Mertxe Aizpurua.

UPN critica también el contacto telefónico que Sánchez ha mantenido este miércoles con el líder de ERC, Oriol Junqueras, y ha asegurado que el «independentismo es insaciable» y ha abogado por acuerdos entre PP y PSOE.

En la reunión UPN ha abordado también «necesidades de infraestructuras» para Nafarroa, como el canal de Navarra, el TAV, la autovía a Madrid o la nacional 121. «Con estos socios poco o nada puede aportar UPN», ha sostenido además Catalán al ser preguntado sobre posibles acuerdos durante un nuevo mandato de Sánchez.

ERC

Por su parte, el portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, ha trasladado a Sánchez en una reunión celebrada acto seguido que para que su partido apoye su investidura, además de la amnistía, tiene que haber un compromiso de que el conflicto político se resolverá mediante una votación, así como una solución al déficit fiscal catalán y a los problemas de los trenes de cercanías.

Además, ha dejado claro que ahora solo están negociando su eventual apoyo a la investidura, no a los Presupuestos para 2024 ni mucho menos un pacto de legislatura. Algo que le distancia del PNV, que dijo la víspera que no tiene sentido apoyar la investidura y no atar los Presupuestos, al ser «el instrumento del Gobierno».

En la reunión con Rufián, Sánchez ha estado acompañado del ministro de Presidencia en funciones, Félix Bolaños, pero no de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, que sí acudió a la cita con el PNV.

Así lo ha dicho en la comparecencia que ha protagonizado tras su entrevista con Sánchez, en la que también ha participado el ministro de la Presidencia en funciones, Félix Bolaños. A diferencia de lo que ha ocurrido con el PNV y Coalición Canaria, en esta cita no ha estado la ministra de Hacienda en funciones, María Jesús Montero.

Rufián ha definido como «exigentes» pero «razonables» las condiciones que pone ERC para apoyar la investidura de Sánchez y ha evitado dar detalles sobre el estado de las negociaciones apelando a que la discreción se imprescindible para que fructifiquen.

«Desconfíen de quien habla mucho, hace cuatro años no se hablaba tanto y salió bien», ha deslizado Rufián, quien ha reivindicado en varias ocasiones el acuerdo para la creación de una mesa de diálogo sobre el conflicto político que les llevó a abstenerse en la anterior investidura de Sánchez.