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La ciudad francesa de Montpellier adopta el transporte público gratuito para sus habitantes

Los residentes de Montpellier están exentos desde este jueves de pagar el transporte público. Se les darán pases renovables anualmente.

Tranvía de Montpellier. (Pascal GUYOT | AFP)

Desde este jueves, los transportes públicos serán gratuitos para los 500.000 habitantes de la ciudad de Montpellier, en el sur del Estado francés, una de las mayores urbes europeas en optar por esta iniciativa.

En Europa, Luxemburgo, con 650.000 habitantes, decidió que el transporte público en el país fuera gratuito desde 2020, al igual que la capital de Estonia, Tallín (445.000 habitantes), en 2013.

En el Estado francés, una cuarentena de municipios ya han dado este paso, entre ellos Dunkerque, en el norte, pero todas estas localidades tienen menos población que Montpellier y su aglomeración.

1.472 euros al año por familia

Antes de esta medida, la factura anual total de transporte urbano para una unidad familiar formada por dos adultos y dos menores se elevaba a 1.472 euros.

La gratuidad, finalmente, ha ido poco a poco ganando terreno en esta ciudad.

En 2020, se desplegó los fines de semana para todos los habitantes de la aglomeración, y en 2021 se amplió a toda la semana para los menores de 18 años y los mayores de 65.

Desde este jueves por la tarde, se ofrecerá a todos los habitantes pases gratuitos, disponibles en sus dispositivos móviles o mediante tarjeta.

Los usuarios dejarán de validar su título de transporte, pero deberán justificar, en caso de control, un pase válido, renovable cada año con un justificante de domicilio.

«Hemos equipado todos los trenes de tranvía con dispositivos de conteo. Cuentan, gracias a un haz luminoso, el número de personas que entran y salen. Esto nos ayudará a objetivar nuestra política de gratuidad», explica Julie Frêche, vicepresidenta delegada de Transportes.

Antes del inicio de la implantación de esta medida, los abonados al transporte público eran 86.000, según cifras obtenidas por AFP.  A mediados de diciembre, a pocos días del lanzamiento de la gratuidad, eran 260.000.

Tanto para los no residentes de Montpellier como para los turistas, el billete, de 1,60 euros (1,75 dólares) por unidad, seguirá siendo de pago e incluso podría aumentar de precio.

Para compensar la pérdida de ingresos en la taquilla, la municipalidad se apoyará en un impuesto adeudado por las empresas de más de 11 asalariados, que progresa desde hace tres años.

También prevé un ahorro de casi dos millones de euros (2,20 millones de dólares) gracias a la supresión de los validadores de billetes y, por tanto, de su mantenimiento.