«Fue una pena la forma en que consiguió el PSG los goles en dos fallos muy grandes»

Ha sido siempre un maestro del juego del fútbol y lamenta que la Real no llegue en un buen momento a la vuelta de la eliminatoria con el PSG, aunque no descarta una remontada el martes si recupera su nivel defensivo y se adelanta en el primer tiempo. Le alegra que vuelva a jugar la Euskal Selekzioa.

Mikel Etxarri (Lasarte Oria, 1946) sacó el carnet de entrenador en 1978 en Oviedo como cuarto de una promoción en la que Xabier Azkargorta fue el primero. Tras destacar en el Michelín, con el que sube a Tercera, llegó por vez primera a la Real como ayudante de Salva Iriarte en el Sanse durante tres temporadas (1986-89).

Tras una en la UPV y dos en el Eibar en Segunda (1990-92) vuelve a la Real como entrenador del Sanse tres años y, tras la salida de Toshack en 1995, se convierte en director deportivo hasta la vuelta del galés, para pasar a otras tareas hasta su salida en 2007. Además fue 16 años seleccionador vasco. Analiza la evolución del fútbol a la que se adelantó al dar gran importancia a lo táctico.

¿Cómo ve a la Real este martes en la vuelta de la eliminatoria con el PSG tras el mazazo de la Copa y la derrota en Sevilla?

Al equipo llevo dos meses que no lo veo bien, los titulares no están bien y estás obligado a meter a Mikel Oyarzabal porque los otros delanteros no funcionan. El equipo ha tenido mala suerte con muchos lesionados al mismo tiempo y el gol del Mallorca es un fallo de la defensa. Incluso no jugando bien has estado cerca de tus objetivos, pero nunca has recibido tres goles y ahora los encajas. Antes el tema defensivo te mantenía y con un gol valía. A ver si lo recuperamos. El equipo ha defendido peor que hasta ahora y eso te hace perder partidos. Hay que recuperar ese nivel defensivo para dar la talla y no me extrañaría que la Real la dé ante el PSG. Yo creo que se le puede ganar.

Fue una pena la forma en la que consiguieron los goles en fallos muy grandes. En el primero no es normal que lo meta en un corner sin marcar su mejor jugador y en el segundo Traoré se vende. Luego bastante hizo la Real con mantener el 2-0 porque si meten el tercero desaparecemos. En el primer tiempo la Real tuvo ocasiones. Es difícil, pero si acabamos 1-0 el primer tiempo puede haber una remontada y verse un partido bonito. El PSG no me gustó tanto, pero Mbappé si coge el balón es muy difícil pararlo.

La pena es que la Real no está como en la fase de grupos...

El partido contra el Inter fue espectacular tanto a nivel técnico como táctico, la Real fue un equipo muy completo con jugadores de muy alto nivel. Los partidos contra los austriacos allí, los dos del Benfica y el del Inter aquí fueron extraordinarios. Es muy difícil volverlos a repetir. La fase de grupos fue excepcional tanto en juego como en resultados.

«La táctica es lo que te diferencia de los demás, por eso le doy tanta importancia y cada vez es más importante»

¿El fútbol táctico de su Eibar a principios de los 90 se asemeja a lo que se lleva ahora?

Fuimos el equipo menos goleado de Segunda y el menos goleador (19-22) para quedar en la mitad de la tabla. Era lo que necesitábamos con 19 guipuzcoanos en una plantilla de 22. La táctica es lo que te diferencia de los demás, por eso le doy tanta importancia y cada vez es más importante. Te mide tu rival. Era muy pelma como entrenador. Di un master en Can Barça hablando de los pequeños detalles y Joan Vila, que sacó a Xavi e Iniesta, el día que recibí la insignia de oro de la Federación vino a dar una charla y me dijo que los pequeños detalles son los grandes. Al jugador no le gusta. Una vez Artutxa, que lo tuve también en el Michelín, me dijo que una charla había durado 21 minutos y 15 segundos y siempre decía lo mismo, pero los errores se evitan a base de repetir.

Del Eibar vuelve a la Real para estar quince años en el club.

Tras tres años de entrenador del Sanse, paso a director deportivo en la 95-96. Estuve seis con Luis Uranga en el puesto y fuimos séptimo, octavo, tercero, décimo y los dos últimos decimotercero. Solo seis equipos no bajaron en esos seis años de ese puesto. Y además de medir mucho en lo económico, no pasábamos de cinco extranjeros en plantilla. Esa época recuerdo un Celta-Deportivo con 20. Desde 2001 hasta 2007 no era director deportivo y parecía que la culpa siempre era mía, pero con todas las directivas he disfrutado y todas me trataron bien.

Se estrena como director deportivo con la responsabilidad de sustituir a Joseba Etxeberria, lo  que lleva a la Real a superar por vez primera la barrera de los tres extranjeros al venir Purk y Craioveanu. ¿Qué supone asumir la dirección deportiva cuando se había convertido en un mito a Toshack por sus fichajes?

Estaba de vacaciones en Cambrils, bajo a desayunar y me dice el camarero que nos habían quitado a Etxeberria, que lo había dicho a la noche José María García. Le llamo a Luis y me dice que "es verdad y ya puedes venir a toda leche". Hasta ese momento me decía que tuviéramos calma porque el presidente del Athletic quería hablar para llevarlo, pero que no lo iba a vender.

La sentencia Bosman cambia mucho todo. He trabajado 40 años en la Industria y sé cómo llevan las contabilidades. Nunca hicimos un gasto superior a las posibilidades. Siempre se guardaba una cantidad por si en diciembre necesitábamos fichar. El primer jugador que quería Salva Iriarte era Lamouchi, un medio centro argelino del Auxerre, y no lo fichamos porque se salía de las posibilidades. Yo estoy contento del trabajo con Luis Uranga.

«Fui a ver a Milosevic a Belgrado en un Estrella Roja-Partizan y me gustaron mucho los movimientos de Kovacevic»

Su gran acierto fue Darko Kovacevic, por el que la Real hizo la mayor inversión hasta ese momento, 540 millones de pesetas (3,25 millones de euros), pero también su mejor venta por 3.200 (19,2).

Me puse muy contento porque no teníamos como ahora todos los partidos del mundo en la televisión para ver jugadores, aunque tuve mucho apoyo con Maldini, que le pagábamos por cada vídeo que le cogíamos. Tenías que ir a verlos en directo. Buscábamos un jugador de un estilo parecido a Kodro, que jugara de delantero centro, mirando al frente, que cogiera la espalda a los defensas, con buena visión de juego y remate. Fui a ver a Milosevic a Belgrado en un Estrella Roja-Partizan y me gustaron mucho los movimientos de Kovacevic, porque jugaba de frente, mientras que Milosevic, que fichó por Osasuna y Zaragoza, jugaba mejor de espaldas.

Lo vi tres veces y quisimos comprar a Kovacevic con Salva de entrenador y no nos lo vendieron porque fueron campeones de Yugoslavia e iban a jugar la Copa de Europa, pero le sigo. Lo venden al Sheffield, empieza jugando, mete cuatro goles en quince partidos y deja de jugar. Al año siguiente vamos a por él y lo traemos. Empieza metiendo goles, se lesiona y le doy mérito a Irureta porque, sin meter ninguno en toda la segunda vuelta, lo mantuvo como titular. Estoy orgulloso porque fue la mejor venta hasta los últimos años por 3.200.

Además acierta con otros jugadores que ayudan a lograr ese tercer puesto en 1998...

Luis ponía una teoría buena y difícil de llevar. Él quería que el entrenador y el director deportivo coincidieran en los jugadores y lo llevamos bastante bien. Juan Gómez con Irureta no jugaba al principio, pero luego dio resultados. Hay un fichaje tapado que dio un rendimiento grande como Mild. Luego ha habido jugadores como Khoklov, que podría haber rendido más y estuvo en la plantilla del subcampeonato, o Jankauskas, campeón de Europa con el Oporto de Mourinho. Los problemas llegaron al cambiar de entrenadores.

Estuve a gusto con Salva Iriarte, Irureta y con Krauss. Clemente es un buen tío y buen entrenador, pero no tiene filtros. Eso sí, nunca echaba la culpa a los demás. Bonilla ficha con Krauss, cambiamos de entrenador y viene Clemente, que lo pone el primer partido y no lo alinea más como titular a pesar de que en siete partidos metió tres goles. Lo tuvimos que ceder al Salamanca de Segunda y metió cinco en siete partidos y se quedaron a un punto del ascenso y Balta, su entrenador, lamentaba que no se lo dejáramos  antes.

Luego lo malvendemos al Toulouse, donde es tercer máximo goleador de la Liga francesa y lo ficha el Nantes con Denoueix. Demetradze no juega con Toshack, se le cede al Metalurg Donetsk y en su segundo año fue máximo goleador de la Liga ucraniana con 16 goles. Vino del Dinamo de Kiev tras ser con 24 el máximo goleador de la liga rusa.

Con la llegada de Toshack deja de ser director deportivo y realiza otras tareas...

Hago informes de los rivales el año del subcampeonato, que me tocó seguir al Deportivo y todos los fines de semana estaba con Irureta. Ese sí fue un buen año. Dejo la Real con el descenso, que lo pasé muy mal. No afronté de frente tener que asumir que se bajaba. Fue la vez que más cerca estuvimos del descenso y bajamos.

«Olabe es un tío muy preparado, muy estudioso, con mucho conocimiento, pero antes Loren también hizo un gran trabajo»

Fue el primero en apostar por Olabe como técnico al nombrarlo entrenador de los juveniles de la Real tras acabar su contrato como jugador.

Roberto es un tío muy preparado, muy estudioso, con mucho conocimiento y muchos filtros, pero no solo destacaría a él. Antes hemos tenido a Loren, que hizo un gran trabajo como director deportivo al igual que Roberto. Ha tenido mucha importancia y la gente no lo ha valorado cuando ha tenido un recorrido importante en la Real y en la formación. La Real siempre ha tenido gente válida en esa posición, que ha aportado valores, otra cosa es que no todos los fichajes hayan salido bien.

Cuando era director deportivo también tenía a Imanol en el primer equipo de jugador.  ¿Qué le parece como entrenador?

Es muy bueno, no creía cuando era jugador que iba a tener esa afición a ser entrenador. Le doy una importancia tremenda. Es más valiente que yo, que tampoco es difícil. Para ser entrenador tienes que vivir el fútbol con pasión y la tiene acompañada de la exigencia sobre sí mismo y la competición. Es difícil preparar un partido cada tres días, hacer alineaciones pensando que los jugadores no se lesionen. Jugar en tres competiciones de alto nivel tiene mucho valor.

También estaba en su primera plantilla Unai Emery...

Toda la vida le ha gustado muchísimo el fútbol y discute consigo mismo mucho. Es más de mi estilo. En el banquillo todo el tiempo está corrigiendo. Tengo una anécdota cuando lo entrenaba en el Sanse, que perdemos 2-1 porque tras despejar un corner en el borde del área empieza a marear, le quitan el balón y nos meten gol. Le monto una bronca apoteósica y me contesta que “a ver si no podemos jugar ni cuando tenemos el balón”. Era muy inquieto jugando y muy cabezota. Me gusta la gente que no dice por decir, que es capaz de debatir.

«Siempre hemos tenido buenos entrenadores por nuestra idiosincrasia. Tenemos los vascos valores muy aplicables en el fútbol»

¿Por qué hay tantos entrenadores vascos que triunfan?

Tenemos una cuadrilla que son fenómenos. Con Arteta es el único que no tengo confianza. El último que ha llegado a Primera es Iñigo Pérez, otro alumno, un chaval fenomenal. Se han puesto de moda porque están a un nivel alto y por sus salidas al extranjero. Antes no salían, pero siempre hemos tenido buenos entrenadores por nuestra idiosincrasia. Los vascos tenemos unos valores muy aplicables en el fútbol. El deporte vasco se realiza con herramientas utilizadas en el trabajo diario. Desde jóvenes se interioriza lo que es competir. Se compite tanto que además se juega dinero en las apuestas. Esos valores de competición, de amar el deporte, lo tenemos en la vida normal.
 
¿Qué ha supuesto con este nivel ser seleccionador vasco?

Ha sido un motivo de satisfacción y además contar con la compañía de Iribar, Irureta y Amorrortu... Durante 16 años siempre esperaba el partido, me he divertido mucho, he sufrido porque los partidos me los tomo en serio y más cuando estás con la selección. Hemos tenido la oportunidad de jugar partidos muy interesantes. Es una pena que haya dejado de disputarse el de diciembre, pero ahora se va a jugar este mes contra Uruguay.
 
¿Cual es la disposición de los jugadores para esos partidos?

Es impresionante las ganas que ponen para venir sin ninguna obligación y cuando tienen pocos días de vacaciones. Es un grupo formidable, todos ilusionados con venir y los clubes también están dispuestos a ceder sus jugadores, que están comprometidos. Te llamaban para saber si había partido, muy interesados.