INFO

Un informe de la ONU concluye que Israel tiene como estrategia causar «máximo daño» a civiles

El documento elaborado por la Comisión Internacional e Independiente de Investigación para Palestina concluye que tanto Israel como Hamas y otros grupos armados palestinos han cometido crímenes de guerra y contra la humanidad. Israel tacha el texto de «abominable e inmoral».

Una calle destruida en la localidad de Khan Yunis, en la franja de Gaza. (EYAD BABA | AFP)

La enorme pérdida de vidas civiles en Gaza (más de 37.000 por el momento) y la masiva destrucción de infraestructuras no militares en la Franja forman parte de «una estrategia consistente en causar el máximo daño» atacando intencionadamente a la población, resalta el primer informe de investigadores de la ONU sobre el conflicto.

Elaborado por la Comisión Internacional e Independiente de Investigación para Palestina, que analiza por mandato de Naciones Unidas todos los hechos ocurridos desde los ataques del 7 de octubre, concluye que tanto Israel como Hamas y otros grupos armados palestinos han cometido crímenes de guerra y contra la humanidad.

En el caso de Israel, la comisión presidida por la veterana jurista sudafricana Navi Pillay –antigua jueza de la Corte Penal Internacional– destaca que el Gobierno del primer ministro Benjamín Netanyahu «ha dado a sus fuerzas de seguridad carta blanca para atacar objetivos civiles de forma amplia e indiscriminada en Gaza».

Ello parece responder a la aplicación de la llamada ‘doctrina Dahiya’, que recibe su nombre de un barrio de Beirut (Líbano) controlado en su día por la milicia Hizbullah y arrasado en 2006 por la fuerza aérea israelí. Consiste en dar una respuesta desproporcionada, sin distinción entre civiles y militares, a ataques de grupos armados, algo que parece haberse reproducido a gran escala en Gaza.

El informe denuncia un «asedio total» de Israel contra Gaza, que según el informe fue definido por el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, como una medida de represalia en la que «se lucha contra animales y hay que actuar en consecuencia».

El informe, que se presentará ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU el 19 de junio, acusa a Israel de «uso del hambre como arma, asesinato, ataques intencionados contra civiles, transferencia forzada, violencia sexual, tortura y detención arbitraria».

El informe también estudia con detalle los ataques del 7 de octubre perpetrados por grupos armados palestinos, con abusos que también podrían constituir, según la comisión crímenes de guerra y contra la humanidad, perpetrados de forma coordinada por más de mil miembros de Hamas y milicias afines.

En ellos, detalla el informe, fueron asesinadas más de 1.200 personas, de las que al menos 809 eran civiles, 280 mujeres, 40 niños y niñas y 25 personas de más de 80 años.

Ancianas, madres, bebés...

El documento relata casos como el de una niña de nueve meses asesinada cuando intentaba esconderse junto a su madre en el kibutz de Beeri, o el de una mujer de 79 años y su nieta autista a las que mataron porque caminaban demasiado despacio y dificultaban el repliegue de los atacantes.

En el Festival Nova de música murieron 364 asistentes, algunos de ellos cuando intentaban escapar u ocultarse en baños públicos, vehículos o contenedores de basura.

En estos ataques se perpetraron, no de forma aislada sino repetidamente en distintos lugares, actos de violencia sexual, como la humillación a mujeres «mostradas como trofeos», aunque no se ha conseguido confirmar si se cometieron violaciones, como se denunció en su momento.

El informe concluye que ni los ataques del 7 de octubre ni las consecuentes acciones militares de Israel en Gaza «deben verse de forma aislada» sino como parte de un ciclo de violencia y agresión contra el que la única forma de actuar es «garantizando un total respeto de la ley internacional».

Ello incluye, subraya la comisión, poner fin a la ocupación israelí de los territorios de Palestina, así como a la discriminación, opresión y la denegación del derecho a la autodeterminación de su pueblo.

«Abominable e inmoral»

La respuesta de Israel no se ha hecho esperar. Su embajadora ante la ONU en Ginebra, Meirav Eilon Shahar, ha tildado el informe de «abominable e inmoral» y ha denunciado que la comisión «ha probado una vez más que sus acciones están al servicio de una narrativa contra Israel, y que nunca hará justicia a las víctimas del terrorismo palestino».

A su juicio, el documento «justifica el horrible ataque del 7 de octubre contextualizándolo a través del punto de vista palestino, y sin mencionar décadas de terrorismo o los continuos lanzamientos de cohetes contra el territorio israelí». También «intenta de forma intolerable y repugnante establecer una falsa equivalente entre soldados de las fuerzas de seguridad israelíes y terroristas de Hamas en lo que respecta a actos de violencia sexual».

Meirav Eilon Shahar remarca que Hamás es «una organización terrorista sin ley», mientras que Israel es «un país democrático comprometido con el Estado de derecho y con un ejército que opera en línea con las normas internacionales».

Desnutrición infantil aguda

También ayer el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) denunció la interrupción del tratamiento para la desnutrición aguda que estaban recibiendo unos 3.000 niños en el sur de la franja de Gaza, como consecuencia de los ataques de las últimas semanas contra la ciudad de Rafá y sus alrededores.

«Siguen apareciendo imágenes horribles de Gaza de niños que mueren ante los ojos de sus familias debido a la continua falta de alimentos y suministros nutricionales, y a la destrucción de los servicios de atención sanitaria», declaró la directora regional de Unicef para Oriente Próximo y el norte de África, Adele Khodr.

«Los primeros resultados de los recientes exámenes de malnutrición en las gobernaciones del centro y el sur de Gaza indican que los casos de malnutrición moderada y grave han aumentado desde la segunda semana de mayo, cuando la entrega de ayuda y el acceso humanitario se vieron considerablemente restringidos por la escalada de la ofensiva de Rafá», añadió.

«Nuestras advertencias sobre el creciente número de muertes infantiles debidas a una combinación evitable de desnutrición, deshidratación y enfermedades deberían haber movilizado una acción inmediata para salvar las vidas de los niños y, sin embargo, esta devastación continúa. Con los hospitales destruidos, los tratamientos interrumpidos y los suministros escasos, nos estamos preparando para más sufrimiento y muertes infantiles», relató Khodr.

Cohetes desde el Líbano

Ya este miércoles, el Ejército israelí ha detectado el lanzamiento de al menos 160 cohetes desde el Líbano hacia diferentes puntos del norte de Israel.

«Varios proyectiles fueron interceptados y otros cayeron en distintas localizaciones del norte de Israel» indicó un comunicado del Ejército. Según los servicios de emergencia, todavía no se han reportado heridos.

Este bombardeo apunta a ser una respuesta a la muerte de cuatro milicianos de Hizbullah en un ataque israelí en el sur de Líbano esta madrugada, en el que habría muerto el comandante Taleb Sami Abdallah, el cargo más alto eliminado por Israel desde octubre.