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Putin y Xi buscan aumentar su influencia en la cumbre de Kazajistán

El presidente ruso, Vladimir Putin, y su homólogo chino, Xi Jinping, se reunieron ayer en Kazajistán, donde participan en la cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghai. Con esta reunión regional, ambos mandatarios buscan fortalecer las alianzas y aumentar su influencia en Asia Central.

Los presidentes de China y Rusia, Xi Jinping y Vladimir Putin, respectivamente, ayer en Astaná, sede de la cumbre de la OCS. (Sergei GUNEYEV | AFP)

El fortalecimiento de la interacción entre Rusia y China ayuda a estabilizar la situación internacional, afirmó ayer el presidente ruso, Vladimir Putin, en una reunión con su homólogo chino, Xi Jinping, en los márgenes de la cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghai (OCS).

«La interacción ruso-china en los asuntos mundiales es uno de los principales factores estabilizadores en la arena internacional», manifestó Putin al señalar que Moscú y Pekín continúan «fortaleciendo la interacción en esta dirección».

Aseguró que «las relaciones ruso-chinas de amplia asociación e interacción estratégica atraviesan el mejor período de su historia. Se erigen sobre los principios de igualdad de derecho, provecho mutuo y respeto a la soberanía de ambos».

Recordó su visita en mayo a China, el primer viaje al extranjero que realizaba tras su reelección, que «nos permitió constatar una vez más lo estrechas que son las relaciones históricas entre Rusia y China». Agradeció a Xi el «cálido» recibimiento en Pekín.

«Nuestra cooperación no está dirigida contra nadie, no creamos bloques ni alianzas. Simplemente actuamos en interés de nuestros pueblos», añadió el mandatario ruso.

Por su parte, Xi destacó que la cooperación entre ambos países «avanza establemente» por la ruta señalada.

Los miembros permanentes de la OCS son Kazajistán, India, China, Kirguistán, Pakistán, Rusia, Tayikistán, Uzbekistán y, desde al año pasado, Irán. En total, representan el 40% de la población mundial.

Cuenta también con 14 Estados socios de diálogo, entre ellos Turquía y países árabes del Golfo. Está previsto que hoy, al término de la cumbre, se anuncie la adhesión de Bielorrusia y que China asuma la Presidencia rotatoria.

La organización está pensada como una plataforma de cooperación frente a las organizaciones occidentales que debe contribuir a la ascensión de un mundo «multipolar».

Lazos entre el país anfitrión y China

El presidente de Kazajistán, Kasym-Yomart Tokayev, celebró que las relaciones con China viven un «período dorado de desarrollo».

Resaltó que China es el primer socio comercial y de inversiones de Kazajistán y que en los últimos 30 años el intercambio comercial entre ambos países se ha multiplicado por cien, alcanzando el año pasado la cifra récord de 41.000 millones de dólares.

«Independientemente de cómo cambie la situación internacional, nuestras aspiraciones de preservar la amistad con Kazajistán, nuestra determinación de desarrollar una cooperación multifacética y nuestro compromiso de apoyarnos mutuamente en cuestiones clave permanecerán inmutables», dijo a su vez Xi.

Mostró su deseo de que ambos países hagan esfuerzos para construir una comunidad más dinámica y de mayor contenido para el «destino común de la humanidad».

 



Erdogan
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, animó a su homólogo ruso, Vladimir Putin, a visitar Turquía «lo más pronto posible». Subrayó que el objetivo es elevar el comercio bilateral entre Turquía y Rusia hasta los 100.000 millones de dólares. En estos momentos, es de 55.000 millones.


Bielorrusia
«Lo principal es demostrar al mundo que existen (…) otros centros de poder en los que se respetan los intereses de todos los Estados sin excepción», declaró el presidente bielorruso, Alexandr Lukashenko. Al término de la cumbre se anunciará la adhesión de Bielorrusia.