No podemos dejar de hacer mención a las últimas declaraciones efectuadas por Andoni Ortuzar el pasado domingo en el día del Alderdi Eguna. Con su más puro estilo, nos vino a decir, alto y claro, que: «Necesitamos más el diálogo y la concertación, que la pancarta y la confrontación»...

Desde nuestra plataforma AP-8 Peajerik Ez, le decimos que ya hay algo en lo que estamos totalmente de acuerdo, siempre y cuando, no se trate de otra fábula más, y que esas palabras sean de verdadero vasco. Por nuestra parte, en ningún momento hemos dejado de pedir diálogo (con inútiles resultados), pues estamos deseando dejar de seguir sacando nuestras pancartas.

Cada vez que hacemos una protesta o concentración, enseguida se encargan de seguir poniendo parches y tapaderas para tratar de lavar la imagen, pero de diálogo y soluciones nada. La última que se han sacado de la manga es la construcción de un Bidegorri entre Amorebieta y Iurreta que requerirá una inversión de 9,4 millones de euros y un plazo de ejecución de veinte meses.

No dejando de ser esto una mejora, seguimos sin creernos que esta sea la solución al tráfico existente en la N-634, y menos para los muchos ciclistas que transitan por esta carretera. Pues nadie puede llegar a pensar que asociaciones ciclistas y aficionados vayan a ir a entrenar al bidegorri. ¿Esto es una solución, o más bien es una estrategia para tratar de neutralizar nuestras concentraciones y protestas?

Ahora la Diputación nos anuncia los nuevas obras en la N-634, en Amorebieta, en el punto donde se incorporan a la nacional, en sentido Donostia, los vehículos procedentes del polígono industrial Boroa. El objetivo de estas labores es reforzar la seguridad y la visibilidad de este tramo. La actuación supone una inversión de 526.000 euros, y consistirá en una nueva rotonda.

En definitiva, más parches, más tapaderas y más obras para los suyos (por lo que les toca) y ninguna solución, para no soltar la gallina de los huevos de oro que le supone el peaje. Nuestro diputado general ya nos dijo en su momento que ya nos conocía por la prensa y que si teníamos algún problema le enviaríamos información. Y cómo él, todo el resto de personas a las que nos hemos dirigido nos han ido dando por el mismo sitio. ¿Este es el diálogo al que se refiere el Sr. Ortuzar?

La N-634 forma parte de la red de carreteras forales de interés preferente, y en el tramo Ermua-Usansolo, registra una intensidad media diaria de 26.000 vehículos elevándose a 30.000 vehículos en días laborables. De ellos 4.500 vehículos son pesados. Habrá que hacer la pregunta a nuestro Diputado General, de si sigue pensando que Durangaldea es el pulmón verde de Bizkaia, y por qué en otras carreteras con, un tercio de este aforo, las considera saturadas, y por lo tanto actúa desdoblándolas en autovías, y en esta no muestra ningún interés, convirtiéndola en la más congestionada y peligrosa del herrialde.

De todos las posibles soluciones que hemos propuesto para tratar de resolver el problema, a día de hoy ninguno ha sido respondido. Se le propuso en su momento, que todas aquellas personas residentes en Bizkaia, tuvieran el derecho de poder utilizar la AP-8 de forma gratuita, en el viaje ida y vuelta en 24 horas. De esta forma, sería más justo, ya que todas y todos los que cotizamos aquí tendríamos los mismos derechos y podríamos acudir a nuestro puesto de trabajo de una forma segura y sin que ningún vizcaíno ni vizcaína tuviéramos que pasar por caja... Todavía estamos esperando la respuesta.

De esta forma, ya no sólo saldría beneficiada la gente que reside en esta zona, sino también todos aquello@s que por motivos de trabajo tendrían que desplazarse al este de Bizkaia.

Al igual que ellos, nosotros y nosotras, también debemos decir alto y claro, que la gente que vivimos y residimos en esta zona de Bizkaia, somos gente decente, honrada y leal, y que para nada merecemos que el Sr. Rementeria nos considere vizcaínos de segunda. Pagamos religiosamente nuestro impuestos y cumplimos estrictamente con nuestras obligaciones, y por lo tanto, tenemos los mismos derechos, y uno de ellos, el que llevamos tiempo reclamando, es el derecho a la movilidad segura y eficiente en nuestros desplazamientos, sin tener que pasar por caja. «La seguridad no es un lujo que hay que pagar si no un derecho».. Y mientras esto no se cumpla, todos y todas nos seguimos preguntando en dónde queda su dialogo y concertación. Menos desconsideración y más respeto.