El juez Roger Thomas ha aceptado el recurso de la defensa de Antton Troitiño contra su extradición al considerar que la Audiencia Nacional española no ha cumplido con los nuevos requisitos introducidos el año pasado en la Ley de Extradición británica, según informa Efe.
En la vista de hoy para escuchar el veredicto no han estado ni Troitiño y sus abogados ni la Fiscalía, que representa a las autoridades españolas, que deberán sopesar ahora si presentan un recurso ante una instancia superior.
La nueva cláusula 12A de la Ley de Extradición exige a los estados demandantes asegurar que la ausencia física del procesado es «el único motivo» por el que no puede fijarse fecha de juicio y hacer avanzar las diligencias judiciales en el país.
La Audiencia Nacional alegó que esa es la única razón por la que no hay fecha de juicio para Troitiño, pero no dio explicaciones de por qué no trató de ponerse en contacto con él por videoconferencia u otros mecanismos.
La falta de justificación por parte de España ha motivado que lord Thomas, máxima autoridad de la judicatura en Inglaterra y Gales, favoreciera el recurso de la defensa.
El pasado mes de abril, el juez Howard Riddle, de la Corte de Magistrados de Westminster, autorizó la extradición del donostiarra por el cargo de supuesta pertenencia a ETA, aunque rechazó el otro cargo que le imputaba el Estado español, el de falsificación y posesión de documentos oficiales, acusación perteneciente a la primera detención en Londres, en junio de 2012.
La sentencia de hoy corresponde al tercer juicio de extradición a Troitiño en Gran Bretaña, el primero de los cuales terminó cuando en octubre de 2013 el Tribunal Europeo de Derechos Humanos revocó la doctrina Parot.
Troitiño abandonó la prisión de Huelva en 2011, tras pasar más de 24 años encarcelado. Un año después fue detenido en la capital británica, pero en octubre de 2013 el Tribunal Superior de Londres decretó su libertad condicional.
Sin embargo, el 13 de febrero de 2014 volvió a ser detenido, cuando acudía como cada día a firmar a comisaría, para volver a ser puesto en libertad un día después.
Tras ello, el Estado español volvió a pedir su extradición, después de que la Audiencia Nacional abriera un nuevo caso contra él. Pese a ello, en octubre de 2014 la Justicia británica volvió a rechazar la extradición.