Joseba Azkarraga, en nombre de esta red ciudadana, ha remarcado que «el fin de la dispersión no puede tener precio político alguno», ya que «plantear exigencias al colectivo de presos y presas vascos al margen de lo estrictamente recogido en la legislación supone una arbitrariedad, a la vez que una ilegalidad».
«El mantenimiento de la dispersión a los presos vascos afecta directamente al colectivo familiar, colectivo este que nunca ha sido juzgado, ni condenado por delito alguno», ha añadido.
En su nota, Azkarraga recuerda que el propio Fernández Díaz trató de evitar mediante «alguna forma de ingeniería jurídica» la liberación de los represaliados sometidos a la denominada Doctrina Parot a pesar de la decisión de los tribunales europeos, y se pregunta cómo este Gobierno español puede «aplaudir las conversaciones de paz que se han desarrollado en Colombia y despreciar y obstaculizar el camino hacia la convivencia que es necesario desarrollar en este país».
El representante de Sare llama a la sociedad vasca para que sea «palanca y motor» contra esta política carcelaria, con una primera cita este sábado a las 17.00 en el Boulevard de Donostia, y ha valorado positivamente las respuestas al ministro por parte de Itxaso Atutxa (PNV) y Patxi López (PSE).