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Habilitada una sala para acompañar a menores en los momentos previos a ser operados

Desde esta semana los menores que van a ser intervenidos quirúrgicamente en el Complejo Hospitalario de Nafarroa podrán permanecer acompañados por un familiar durante los procesos previos a la inducción a la anestesia, en una nueva dependencia anexa al quirófano habilitada para tal fin.

La sala de acompañamiento a menores intenta reducir el estrés que entraña una operación. (GOBIERNO DE NAFARROA)
La sala de acompañamiento a menores intenta reducir el estrés que entraña una operación. (GOBIERNO DE NAFARROA)

Hasta ahora, esta opción no era posible porque la sala de acogida estaba ubicada dentro del recinto quirúrgico y, por lo tanto, era un espacio de circulación restringido con obligatoriedad de cumplir medidas de higiene hospitalaria que no podían ser llevadas a cabo por personas ajenas al circuito de trabajo.

La sala de acompañamiento infantil tiene una superficie de 14,50 metros cuadrados, con capacidad para alojar dos camas y los correspondientes acompañantes.

Tiene un acceso independiente desde la segunda planta maternal y se ha dividido de la zona de post-operatorio mediante una mampara acristalada. El coste de la adecuación ha sido de 20.825 euros.

Con esta nueva dependencia, que beneficiará a unos 2.150 niños y niñas que se operan de media anualmente en el CHN, se busca reducir el estrés quirúrgico y la ansiedad en los pacientes y en la familia, así como el trauma por separación que afecta a ambos.

La presencia del familiar es en todo caso voluntaria, y para acceder a la sala deberá colocarse la indumentaria necesaria, consistente en bata, gorro y calzas cubre-zapatos.

No están permitidos los dispositivos electrónicos ya que pueden interferir en el trabajo y la grabación de documentos gráficos puede comprometer el derecho a la privacidad de otros pacientes o del personal.

La medida, según precisa el Ejecutivo, responde a las múltiples solicitudes en este sentido que las familias venían planteando en los últimos años.

Con ella también se da cumplimiento a la Carta Europea de los Niños Hospitalizados, aprobada por el Parlamento Europeo en 1986 (Resolución A2-25/86, de 13 de mayo), que establece que los niños tienen derecho a estar acompañados durante su permanencia en el hospital, el máximo de tiempo posible, por sus padres y madres o por la persona que los sustituya, no como espectadores pasivos sino como elementos activos de la vida hospitalaria.

El ejercicio de este derecho no debe perjudicar en modo alguno ni obstaculizar la aplicación de los tratamientos a los que hay que someter al paciente.