Un referéndum criado en colectividad
20 horas para que se abran lo colegios electorales. Perdón. 20 horas para que los ciudadanos catalanes acudan a los colegios electorales para decidir su futuro. Y es que muchos de los centros ya están abiertos y tienen a decenas de voluntarios en su interior defendiendo, de una forma u otra, que se mantengan abiertos hasta las 09:00 de mañana.
Catalunya afronta mañana una oportunidad histórica. «Ya estamos haciendo historia», defienden muchos. Y a este punto se ha llegado gracias al compromiso y participación activa de miles de vecinos. Es el caso de Gràcia.
El camino hasta llegar a este fin de semana ha sido largo y no exento de peligrosas curvas. Pero el procés se encuentra en la recta final y ya solo queda poder ejercer el derecho a voto. Sin embargo, la amenaza del Estado español de precintar los centros de votación ha obligado a un último esfuerzo.
Desde ayer por la tarde decenas de vecinos de la Vila hacen turno en la residencia de personas mayores de Siracusa. Pese a que al ser un centro de personas mayores los domingos suele estar abierto, todavía no saben si aquí podrán votar, ya que la directora ha comunicado su intención de no abrir, asumiendo la orden judicial. «Confíamos en la Consellería», afirma Carles, uno de los voluntarios. Hoy a las 08:00 han recibido la visita de los Mossos, que han acudido tan solo a levantar acta y realizar fotos. Siete personas han pernoctado en el lugar.
Regina, de 49 años, subraya que «la amenaza es esta noche». Por ello, la guardia de las próximas horas será mayor. Con este objetivo han formado varios grupos de Whatsapp que engloban a más de 100 personas de todas las edades, espectros sociales y origen. «Cada uno tiene sus motivaciones».
A poco más de 100 metros, en la escola Univers, la realidad es bien distinta. Padres y madres se han hecho cargo del centro y así será hasta mañana. 30 adultos y 30 menores han pasado la noche allí, donde han preparado actividades que durarán todo el fin de semana.
El interés que ha suscitado a nivel internacional el referéndum catalán está fuera de toda duda, pero la escola Univers ha ido un paso más allá. Una quincena de medios estatales y europeos se agolpaban en la entrada hacia las 11:00, por lo que han decidido llevar a cabo una especia de visitas guiadas. «Lo de mañana, un referéndum, debería ser algo normal», afirma Albert Prats en relación al circo mediático.
Fiesta de otoño
Cada centro de votación es un mundo y así, cada uno ha organizado estas horas de la manera más conveniente para mantener abierto el centro. Ernest, que tiene una hija de cuatro años en la escola Josep María Jujol, nos cuenta que están celebrando la fiesta de otoño. Desde ayer a las 16:00 hasta mañana a las 09:00. Eso sí que es una fiesta.
La comunidad educativa, padres, madres y profesoras se han organizado: «Se acaba a las 09:00. Lo que pase a partir de entonces ya no es cosa nuestra», explica a NAIZ con una media sonrisa.
Tres ejemplos de un barrio organizado para poder votar.