Sustrai Erakuntza ha denunciado ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, con sede en Estrasburgo, «la operación urbanística especulativa» prevista en el barrio iruindarra de Etxabakoitz para albergar la futura estación del TAV en Iruñerria, según informó este colectivo en una nota.

«Tenemos el convencimiento de que toda la tramitación de esta macroinfraestructura ha estado plagada de irregularidades desde su inicio en 2010», destacó Sustrai, que recordó que la nueva estación del TAV supondría el desmantelamiento de la actual, la creación de una nueva área comercial, dos áreas residenciales con 9.000 viviendas nuevas, un área biomédica y una feria de muestras, a través de un Plan Sectorial de Incidencia Supramunicipal (PSIS), mediante el que el Gobierno navarro se apropia de competencias municipales.

Desde 2010 en los tribunales

En noviembre de 2010, Sustrai presentó un recurso contencioso-administrativo ante el Tribunal Superior de Justicia navarro (TSJN), destacando que no se habían estudiado las alternativas al proyecto, incluida la no realización de la obra, tal y como exige la normativa, que requiere la elaboración de un estudio de impacto ambiental.

La demanda hacía un análisis exhaustivo de las irregularidades en la tramitación del PSIS, como afecciones por tráfico y niveles de ruido superiores a lo permitido, la contaminación del suelo y las aguas subterráneas en la zona donde está prevista la construcción de las viviendas, así como impactos ambientales en los ríos Elortz, Sadar y Arga.

Tras un periplo de cinco años por el TSJN y el Tribunal Supremo español, Sustrai ha elevado ahora la demanda al Tribunal de Estrasburgo. «Queremos destacar, otra vez, la falta de análisis de las alternativas posibles al proyecto. Ello es debido a que el Tribunal Supremo español alega para desestimar nuestra demanda que la misma es contra un plan y no un proyecto, de manera que, aunque reconoce que ‘no ha existido un estudio de alternativas’, no lo estima necesario para el caso de los planes», explicó Sustrai, que reclamó al nuevo Gobierno navarro que no dé ningún paso administrativo sobre la estación del TAV.