Al margen de una elección en la que no hubo demasiadas quejas, pero en la que ninguna de las dos parejas terminó del todo satisfecha –Rezusta comentó que el Bizkaia puede admitir algo más y Aimar Olaizola entiende que una de las de Aspe bota un poco de más–, la jornada en el Bizkaia fue una especie de ejercicio de abstracción en el que tanto los guipuzcoanos como los de Asegarce tuvieron que elucubrar en torno a las opciones de cada una, o ambas, de estar en la final del día 9 de abril en el mismo escenario.

Y es que, aunque las cuentas de las cuatro parejas están ya lo suficientemente explicadas, las combinaciones son varias y la ecuación podría quedar resuelta el mismo sábado, si Jaka-Rezusta consiguen la victoria sobre Bengoetxea VI-Larunbe con un resultado entre el 22-12 y el 22-20, variable que dejaría sin interés el partido en Bilbo, con las dos parejas ya citadas para volver a enfrentarse quince días más tarde, con la preciada txapela en juego.

Sin embargo, los cuatro protagonistas coincidieron en tratar de estar centrados en lo único que está en sus manos, alcanzar el domingo los 11 tantos necesarios en el caso de Irribarria-Rezusta y llegar a 22 en el caso del de Goizueta y el de Nájera.

La lección de San Fermín

Como bien dijo Rezusta, cualquiera de las otras tres parejas firmaría ahora mismo la situación del de Arama y el de Bergara, pero el campeón Manomanista quiere olvidarse de esa cifra que les da el pase matemático a la final y afrontar el partido como el resto de los 16 disputados hasta la fecha, sin otro horizonte que el cartón 22.

«No creo que sea la situación más cómoda. Creo que, si salimos confiados en hacer 11 tantos, seguro que no los conseguimos», afirmó el delantero de Aspe, basándose en su propia experiencia.

Esta semana se han cumplido dos años desde su debut en el Astelena, pero todo en su carrera ha sido meteórico y también vivió una situación similar en los últimos San Fermines. La cosa terminó bien y, junto a Barriola, logró superar los 15 tantos que necesitaban para clasificarse para la final, pero lo vieron todo muy complicado cuando Altuna III-Zabaleta se les adelantaron 11-18 (19-22 al final).

Aimar Olaizola no fue capaz de recordar un precedente en el que se viera envuelto en alguna situación parecida, pero no tiene demasiadas esperanzas en que sus rivales el domingo puedan quedarse fuera de la final. «No suele ser lo mejor, ya ha pasado que una pareja que tuviera que hacer un determinado número de tantos se quede fuera, pero teniendo en cuenta la pareja que es y los tantos que tienen que hacer...».

Y es que, como recordó el de Goizueta, el campeonato no ha hecho sino confirmar sus pronósticos de inicio. «Ya dije al comienzo del campeonato que es muy difícil ganarle a esta pareja. Atrás está el mejor zaguero del momento y adelante el campeón. Con eso ya está todo dicho, de 17 partidos solo han perdido 2», enfatizó el de Asegarce, que pretende enredar adelante, «pero para eso necesito opciones».

Desestimada la demanda de Xala

Aspe dio a conocer a última hora de ayer que el Juzgado de lo Social número 1 de Eibar ha «desestimado íntegramente» la demanda interpuesta por Xala frente a Fernando Vidarte, en la que solicitaba 1.408.266 euros por unas declaraciones del máximo dirigente de la promotora eibartarra, en las que el de Lekuine entendía que se dañó su imagen.

Según la nota de Aspe, «la sentencia delara que las manifestaciones públicas efectuadas a principios del año 2016 por el representante legal de Aspe, D. Fernando Vidarte, en el sentido de que Xala era un pelotari de riesgo, con propensión a lesionarse debido a sus problemas de espalda, no constituyen vulneración de su derecho a la intimidad y al honor, dado que los problemas de espalda del deportista eran reales, Xala es un pelotari de élite con gran proyección pública, y como tal, está obligado a soportar las críticas acerca de su rendimiento deportivo».J.O.