Eskola 2.0.17 o el mito de la educación de calidad 2.0
Hace años que se empezó a hablar de la reducción de la brecha digital y la educación de calidad utilizando las posibilidades que nos ofrecen las nuevas tecnologías de la información…
Pero 8 años después, la reducción de la brecha digital no es tal; es más, podemos afirmar que no se ha producido a nivel general en la escuela pública y en algunos centros concretos menos aún. Parece insignificante pero la simple elección entre un cero y un uno puede marcar el futuro de un pueblo.
Desde su nacimiento de Eskola 2.0 en el año 2009, hemos pasado de incorporar portátiles en las aulas con sistema operativo libre/gratuito, a añadir a estos un sistema operativo privativo/de-pago y más tarde a que dichos portátiles solo tengan el software privativo/de-pago. Es decir, nos convertimos o lo que es peor convertimos a nuestros hijos e hijas en esclavas de las empresas, canon mediante.
Como consecuencia de que un grupo de personas creyó que el acceso al conocimiento debería ser libre, que el conocimiento debería ser patrimonio de la humanidad y que cualquier persona debe tener derecho a desarrollarse en igualdad de condiciones, existen diferentes programas y sistemas operativos libres que son gratuitos para que cualquier persona puede acceder a ellos y utilizarlos sin limitaciones; es decir, gracias a esas personas tenemos un mundo a nuestro alcance, una infinidad de herramientas culturales de acceso libre no ligadas al poder adquisitivo del usuario, lo cual desde el ámbito público se debería impulsar para que todas las personas seamos iguales y no dependa nuestro desarrollo de nuestro poder adquisitivo (y más en el momento actual, desempleo, empleos precarios, etc.).
El gobierno vasco con su simple elección de no utilizar este tipo de software, se condena (o mejor dicho nos condena) a pagar un montón de dinero a empresas privadas y además introduce de manera sibilina en las aulas el concepto de que solamente se puede ser mediante la posesión, es decir, introduce el concepto de privado frente a comunitario, publico o trabajo en equipo. Es tan simple como que intrínsecamente tienes de asimilar que el medio, en este caso el sistema operativo y los programas que necesitas conocer en las escuelas para no ser un analfabeto digital (o incluso un excluido del grupo) hay que pagarlos, que debes poseerlos para ser un erudito digital o parte de esta nueva sociedad. Parece que no tiene importancia, pero sí, ya que cualquier persona que salga hoy de nuestras escuelas no va a ser un erudito digital, sino que simplemente va a ser un simple usuario de contenidos que empresas privadas venden y para esa persona no habrá nada más que aquello que las multinacionales le ofrezcan poseer. A esto lo debemos llamar adoctrinamiento en el capitalismo y no educación para la diversidad, ni reducción de la brecha digital.
Esto escrito no es más que una pequeña invitación a reflexionar hacia dónde nos dirige la escuela pública vasca y a que la comunidad educativa en general empiece a soñar con un modelo diferente que pueda ser el origen del un nuevo futuro; un futuro en el que las escuelas públicas vascas disfruten de un repositorio de contenidos culturales libres creados por el alumnado/profesorado/familias para el alumnado con posibilidad de valorar, comentar y etiquetar esos contenidos, en vez de comprar licencias de contenidos a diestro y siniestro.