La mayoría sindical de ELA, LAB y ESK de Celsa Atlantic, antigua Laminaciones Arregui, denunció ayer la enésima maniobra de la dirección que, de nuevo, ha impedido que los trabajadores despedidos se reincorporen a la empresa, como les avaló el Tribunal Supremo. A inicio de mes, aplazó al 21 de enero para reincorporarse porque había acumulado las jornadas festivas, y ayer a cursos de formación. En realidad, como denunció la mayoría sindical, la dirección, que no ha podido salirse con la suya con los despidos, «está haciendo la vuelta imposible a los trabajadores con la connivencia de UGT, que sigue todos los planes de Celsa Atlantic».

«Es realmente sospechoso que la dirección haya encargado este cursillo de formación a una fundación de UGT», afirmaron, a la vez que añadieron que «descarta recurrir a Institutos u organismo de formación reglada y acude a esta fundación, con lo que las y los trabajadores también van a pagarlo a través de las subvenciones que recibe IFES. Nos encontramos, por tanto, ante una nueva muestra de los favores mutuos entre empresa y UGT», denunciaron a las puertas de la empresa.

La mayoría sindical mantiene que esta estrategia está diseñada por la dirección con la connivencia de UGT para evitar que esos trabajadores participen en las elecciones sindicales.