El PP se enroca y defiende la legalidad de los sobresueldos reconocidos por dos de sus cargos
«Las declaraciones de Pío García Escudero y Eugenio Nasarre ante el juez confirman la legalidad del sistema de retribuciones de los cargos del Partido Popular». Este es el mensaje que lanzan desde Génova después de que el presidente del Senado español y el diputado reconociesen ante el magistrado Pablo Ruz que el partido completó sus nóminas con sobresueldos.
Alfonso Alonso, portavoz en el Congreso español, ha insistido en que esta fórmula de pago ya fue detallada en la auditoría realizada en el momento en el que saltó el escándalo de los papeles de Luis Bárcenas. «Fue presentada en el informe de la investigación interna sobre las cuentas. Ya se explicó. Todas las retribuciones se ajustan a la legalidad», ha remarcado, durante la rueda de prensa posterior a la Junta de Portavoces.
Según las tesis del PP, las declaraciones de ambos dirigentes certifican la legalidad del sistema de pagos. Estos aseguraron que los sobresueldos, algo generalizado entre los altos cargos de Génova, se abonaban mediante transferencia bancaria y con la correspondiente retención del IRPF.
Al margen de estos pagos, Alonso se ha referido a los 30.000 euros en metálico que Luis Bárcenas, cabeza de toda la trama, hizo entrega a Nasarre como «donación anónima» para la fundación Humanismo y Democracia, para la que entonces trabajaba.
El exalcalde de Gasteiz ha considerado que el dotantivo no correspondía al PP, pero que en aquella época las entregas de dinero anónimas estaban permitidas. Esta práctica estuvo avalada legalmente hasta 2007, cuando se modificó la norma. «Alguien haría la donación anónima en un sobre, pero no es del partido», ha reiterado.