Comienzo con la primera parte de una cita: «El principal objetivo de nuestra política económica es garantizar que nuestro país nunca más sea vulnerable al chantaje económico de otros países». Apuesto sobre seguro si digo que a muchos de ustedes se les ha ido el pensamiento directamente al flequillo de Donald Trump. Pues no, se trata de un extracto de un discurso de Adolf Hitler, pronunciado en la antesala de la Segunda Guerra Mundial, en el que el dictador hacía una defensa mesiánica de la autarquía como instrumento esencial de protección para defender a una Alemania castigada por el paro y la pobreza frente al expolio imperialista del «capitalismo anglosajón».Otra cita, esta vez de Mao Zedong: «Todo lo que hay bajo el cielo es un caos; la situación es excelente». Pues bien, este y no otro es el fundamento de «Maganomics», apelativo con el que la grandilocuencia del trumpismo elonita denomina a su política económica. Su objetivo es poner patas arriba el comercio internacional con el fin último de devolver a «América» su papel de potencia líder del universo. Pero, ¿qué pasará si su receta no funciona? De hecho, todo apunta a que la economía de EEUU será, paradójicamente, una de las primeras en sufrir los efectos de los drásticos aranceles bilaterales. Incluso las bolsas muestran serios signos de nerviosismo, en forma de caídas generalizadas y una fuerte volatilidad. Si todo va mal, ¿cuál será entonces la reacción de Trump y su conciliábulo de visionarios? Guardo para el final la segunda parte de la cita que iniciaba esta pieza: «La nueva Alemania solo podrá construirse asegurando el espacio vital necesario para nuestro pueblo». La raíz del fatídico «Lebensraum». Groenlandia, Panamá, Canadá... Sienten ahora el aliento en la nuca. Porque si la ingeniería del «Liberation day», intencionadamente o no, termina por hundirse como el Titanic, puede que llegue el «Hammertag», el día del martillo. Y si alguien tiene un martillo, uno bien gordo, ese es Donald Trump. Nunca podremos decir que no lo vimos venir. Se estudia en tercero de la ESO.