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Los chicos a una ferretería y las chicas a perfeccionar su cabello y maquillaje. Esta fue la excursión que un colegio de Australia ofreció a su alumnado. Ante esta decisión un padre de una de las alumnas decidió escribir una carta al centro donde, con gran ironía y gracia, exige que las actividades escolares no se dividan por roles de género. La carta ha dado la vuelta al mundo, recabando miles de apoyos.

Stephen Callaghan, el autor de la misiva, alerta a la escuela de «un incidente grave» y arranca la carta explicando que «cuando su hija Ruby salió de casa camino a la escuela era 2017, pero cuando regresó a casa por la tarde, era 1968».

Ironizando sobre lo acontecido, Callaghan sugiere a la escuela que quizá exista «algún túnel del tiempo en el baño de las chicas que haga que éstas hubieran quedado atrapadas en el tiempo».

«Espero que esto se rectifique y que mi hija y otras niñas de la escuela vuelvan a este milenio donde las actividades escolares no se dividen por roles de género» sentencia la carta.

Además de enviar la carta a la escuela, este padre publicó una fotografía del escrito en Twitter, donde ha recibido miles de retweets y like

I wrote a letter pic.twitter.com/oFJp7egVnf

— Grumplestiltskin (@2FBS) 2017(e)ko abenduak 6