Con esta nueva opción para seguir descubriendo la comarca de Cinco Villas, vecina de las tierras navarras de Zangotza, volvemos a la parte meridional de la potente sierra de Santo Domingo, con un itinerario de contrastes paisajísticos sorprendentes. La excursión se mueve por la parte sur de esta sierra, donde empieza a diluirse hacia las llanuras de la ribera del Ebro. En esta zona se encuentra el pequeño pueblo de Fuencalderas, el más oriental de la comarca alta, por donde discurre la carretera que lleva a Ayerbe y tierras del Somontano.

Por Fuencalderas y la ermita de San Miguel de Liso discurre el sendero GR 1, que une la ciudad gerundense de Ampurias y el Cabo de Finisterre, un sendero que discurre por el pie de monte de los Pirineos de claro componente cultural. En esta ocasión, la etapa une Fuencalderas y Agüero en el Somontano oscense. Esta pequeña población empezó a poblarse entre los siglos XII y XIII, conserva recias casonas, las más antiguas del siglo XIV, y su actual iglesia se construyó a finales del siglo XVI.

El alto ‘O Contadero’

Tras dejar el coche en los alrededores de la iglesia de Fuencalderas (861 m.) cruzaremos la carretera para continuar por ella a la derecha unos 500 metros, para abandonarla por una pista situada a la izquierda donde hay un panel que señala la dirección de la ermita de San Miguel de Liso y el paso de Ferruhelo. Pronto estaremos en el alto conocido como ‘O Contadero’, donde hay una casa en cada lado, y donde daremos vista a una espectacular vista sobre la sierra de Santo Domingo. Sin abandonar la pista jalonada por las señales del GR 1 y sin apenas desniveles, alcanzaremos el collado de Cruza Choya donde entramos definitivamente en contacto con los densos bosques de pino silvestre que cubren la zona.

Aquí, al pie del Puy de Roma (853 m.), hay un cruce de pistas con un poste que indica a Ferruhuelo y GR 1. En este lugar dejaremos la pista que sigue hacia la rinconada del barranco de Bergales para tomar el desvío de una pista situada a la derecha, que desciende hacia unas casetas en el fondo del barranco de Bergales. Pronto dejaremos esta pista que finaliza en el pueblo de Aguero, para continuar por una senda que nos llevará por el lado contrario del barranco, para subir a media ladera por los Pacos de Lezinar. Una vez hayamos dejado a la espalda el picacho rocoso de Puy Roldán (885 m.), daremos con el collado de Lezinar.

De la ermita a la cima

La pista la veremos en el fondo del barranco de Bergales, donde realiza un amplio rodeo para suavizar la pendiente. Tras culebrear por una empinada ladera, daremos finalmente con la pista, a la altura de una cruz de peregrinos. Con sólo cruzar la pista hacia el ruinoso corral de Sastre, con el fin de evitar un rodeo de la pista, daremos de improviso con la ermita de San Miguel de Liso, situada en un recoleto rellano herboso, donde pasa de nuevo la pista que continúa hacia el paso de Farrihuelo (982 m.). La ermita del siglo XII y reconstruida en el siglo XIX conserva restos románicos en su viejo ábside y en la adjunta torre del castillo. Desde la fuente el sendero GR 1 inicia un prolongado descenso hacia las tierras de Agüero y el Somontano.

La vista es un aperitivo de lo que veremos desde el cercano Puntal de Pueluza si seguimos una senda situada en la parte trasera de la ermita y cercana fuente protegida por una bóveda de piedra. La senda bordea por la izquierda el picacho rocoso de las Rallas de San Miguel, cruza la Colladeta ‘Os Rayos’ y por la derecha del Puntal de Pueluza, y alcanza las ruinas de un corral ganar el lomo cimero hasta la cumbre (1159 m.). La vista es extraordinaria, especialmente sobre la intrincada comarca alta de Cinco Villas y la espectacular sierra de Santo Domingo. En algún momento, hacia el oriente podremos ver las murallas calizas de Agüero y la rojizas de Riglos. El regreso lo realizaremos por el mismo itinerario.