El Murube es una preciosa montaña que se encuentra en la muga de Araba con Nafarroa. Esta cumbre, además de ser puntuable, tiene una característica muy especial. Y es que, gracias a ella, tendremos la oportunidad de probar una hermosa Vía Ferrata equipada por la gente de Urbasa Abentura. En Euskal Herria no andamos sobrados de Vías Ferratas, así que esto último es algo de agradecer.

Por otra parte, la cumbre del Aizluze consiste en una gigante roca enclavada en el mismo filo, algo único. Y como colofón, la mayor parte de la ruta discurre por todo el filo de la montaña, una gozada vamos.

Desde Larraona subiremos la dura cuesta que discurre por la calle principal, rectos dirección norte. Aparecerá al final del pueblo una pista de cemento por la que continuaremos. Esta sube haciendo zigzags, tiene fuentes a lo largo del camino y es muy empinada.

Nace la Vía Ferrata

Justo antes de llegar al filo de la montaña, sale a la izquierda un sendero que va por toda la base de la pared. Avanzaremos por la base de dicha pared. Al poco, tendremos que superar un tramo rocoso algo resbaladizo que se encuentra equipado con un pasamanos. ¡Atentos siempre a la derecha! Esto es, miraremos vigilantes la pared. Ya que, en unos 10 minutos desde que hemos abandonado la pista de cemento, veremos un cable y escalones de metal. Esta es la inconfundible señal de que, justo ahí, nace la Vía Ferrata.

Se trata de una Vía Ferrata de grado K2, muy vertical, tiene alguna travesía a la derecha y está equipada con cable y escalones. Justo al final, se divide en dos tramos. Cojamos el tramo que cojamos, ambos tienen la misma dificultad. La vía muere en el mismo filo de la montaña. Una vez aquí, podéis torcer a la derecha, por el filo dirección este y, en breve, os toparéis con una emocionante tirolina. Vais a disfrutar un montón con dicha Vía Ferrata.

Si no queréis realizar la Vía, podríais seguir por la pista de cemento hasta llegar el filo de la montaña. Aquí nace un sendero a la izquierda que va por dicho filo.

Volviendo al final de la Vía Ferrata, aquí haremos un paso de langa y saldremos al sendero que va por todo el filo. En dicho sendero torceremos a la izquierda, dirección oeste, para seguir por esta ruta tan agradecida. Y es que, durante todo el recorrido, a la derecha podremos disfrutar de las vistas de los amplios bosques de Urbasa. A la izquierda, en cambio, nos sublimaremos con las vistas del Valle de las Amezkoas, amén de un montón de cumbres.

Primera cumbre: Aizluze

Pronto llegaremos a una primera cumbre, Aizluze (1.049 m). Hay que subir por unas escalas enclavadas en su roca. Es sorprendente la belleza que puede llegar a formar la naturaleza de nuestros montes, increíble. Una vez ascendido, continuaremos por todo el filo hasta llegar a la cumbre puntuable del Murube (1.134 m), situada en la misma muga entre Nafarroa y Araba. Como ejemplo: un paso al oeste y estaremos en Araba, otro al este y en Nafarroa.

En ese punto, podríamos continuar por todo el filo hacia el noroeste. A la altura del collado de Sagastilepo, bajaríamos primero bosque a través y luego por larra hasta salir a la carretera, más o menos, a la altura del cruce entre la carretera A-2128 y la A-3136. Esta opción, naturalmente, nos obligaría a hacer combinación de coches.

Desde la cumbre volveremos sobre nuestros pasos por todo el filo hasta el punto donde hemos salido de la Vía Ferrata. Una vez allí, continuaremos por el filo para llegar, en breve, a la Ermita de San Benito de Larraona. Se trata de unas bonitas larras, donde podremos encontrar un singular dolmen.

Solo nos resta tomar dirección sur para, inmediatamente, coger de nuevo la pista asfaltada. Por último, desandaremos nuestros pasos hasta volver, sin pérdida, a Larraona.