El cambio de interfaz generalizado entre el 3 y el 4 de octubre ya había sido detectado por algunos medios durante una prueba a mediados de agosto.
El propietario de Twitter, Elon Musk, dijo en aquel entonces: «Esto viene directamente de mí. La estética [de la red social] mejorará enormemente», escribió. El cambio es retroactivo y también se aplica a enlaces compartidos en el pasado, incluidas las publicaciones de NAIZ que se han vertido a esta red social.
Muchos usuarios de la red social han considerado que el paso tiene una trascendencia enorme, pues se elimina la fuente de donde se extrae la información y, en consecuencia, se dificulta muchísimo contrastar la veracidad de la misma. Y esto sucede, además, en un tiempo en el que distinguir la noticia fiable de la noticia falsa resulta cada vez más complicado.
Dice el filósofo Lee McIntyre que uno de los ingredientes de la posverdad es el olvido de la fuente: he visto, escuchado algo, pero no sé dónde. Pues bien, tuiter acaba de implementar el borrado de titulares en noticias enlazadas. Otro paso más hacia un mundo de locos. pic.twitter.com/14yIln1jVr
— Azahara Palomeque (@Zahr_Bloom) October 5, 2023
Cuando un usuario comparte un artículo de prensa, solo aparece el nombre del medio en la esquina inferior izquierda de la imagen de ilustración. Para acceder al contenido, hay que hacer clic en esa imagen.
Elon Musk, que compró la red social el año pasado, intenta atajar la caída de sus ingresos publicitarios alentando a los usuarios a pasar más tiempo en la plataforma y a compartir menos enlaces externos.
La red social atraviesa una situación financiera complicada, pues su valor se ha estimado en 13 millones de dólares, menos de un tercio de lo que pagó el excéntrico magnate por ella.
El multimillonario, dueño de Tesla y de Starlink, ha sido acusado de mantener una actitud hostil con los medios de comunicación.
Enfrentamiento con la prensa
El 3 de octubre, Elon Musk afirmó que no consultaba «prácticamente nunca la prensa tradicional».
«¿Qué interés hay en leer 1.000 palabras sobre algo que ya ha sido compartido en X varios días antes?», comentó.
Sin embargo, en septiembre, la Comisión Europea presentó un estudio que indica que la plataforma X, que se retiró del código de buenas prácticas de la Unión Europea (UE) sobre desinformación, es la que tiene «la tasa más alta de informaciones falsas y de desinformación en sus publicaciones».
Este verano, Twitter también fue denunciado ante la justicia francesa por la agencia France Presse (AFP) y tres grupos de prensa francesa que desean obtener elementos para negociar una retribución por el uso de sus contenidos, incluso aunque se trate de extractos.