JUN. 02 2019 - 00:00h Tocando el cielo con la punta de los dedos a lo largo de la Sierra de Elgea Dicen que Sierra de Elgea es la mejor manera de acercarnos al cielo. Javier Iturrixa Es de destacar la multitud de paisajes que podréis admirar a lo largo del paseo las cumbres de la Sierra de Elgea. Avanzaremos por todo el filo de la sierra con el Anboto al este y el Aitzkorri al oeste, con el Udalaitz al norte y la Lautada al sur. Y es que la Sierra de Elgea es la mejor manera de acercarnos al cielo. En Arlaban, justo detrás del bar Gure Amets, sale una pista de tierra marcada con señales del GR. Los primeros metros avanza paralela a la carretera para abandonarla en breve mediante una cerrada curva a derechas. La pista asciende suavemente y, cuando llevamos poco más de un kilómetro desde el aparcamiento, llegaremos a una langa. Aquí la pista sigue a la izquierda. Nosotros, en cambio, saltaremos la langa y seguiremos de frente por el sendero que nace a continuación. El sendero sube y baja suavemente dirección sur. Lo seguiremos sin salirnos en ninguna de sus ramificaciones. Aquí la premisa es avanzar dirección sur hasta llegar al filo de la montaña. No os preocupe desviaros unos cientos de metros al este o al oeste, ya que, irremediablemente, saldréis a dicho filo y, a su vez, a un cortafuegos. Por el cortafuegos avanzaremos dirección este hasta dar con la primera cumbre de hoy, el Usakoatxa (912 m). Hasta Elgeamendi En este punto bajaremos por un empinado sendero situado a la derecha del cortafuegos. Dicho sendero baja vertiginosamente dirección este hasta llegar a un collado, donde hay un cruce de caminos. Aquí seguiremos de frente para subirnos al filo de un nuevo monte y seguirlo sin descanso. De esta manera, llegaremos sin pérdida al Elgeamendi (942 m). Desde este monte tomaremos dirección noreste por la larra hasta llegar a una cuidada pista. Seguiremos dicha pista hacia el norte. En el collado que hay justo antes de una llamativa antena, abandonaremos la pista y subiremos por un empinado sendero al Urdingain (992 m). Bordearemos, haciendo un enorme semicírculo por el filo de la montaña, el valle que tenemos al este. Así es como nos «subiremos» al comienzo del Parque eólico de Elgea y, por consiguiente, al Mugarriluze (1.104 m). «Hitos metálicos» A partir de ahora, el avance es muy simple. Consiste en dirigirnos dirección este por la pista que va por todo filo de la sierra. Si tenéis alguna duda de orientación, solo debéis fijaros en esos «hitos metálicos» con tres aspas de unos 60 metros de altura que os marcan el camino. De esta guisa, subiremos, primeramente, al Aumategi (1.163 m) y, después, al Gaboño/Artia (1.176 m). Desde esta última cumbre volveremos sobre nuestros pasos hasta el último collado por el que hemos pasado. En dicho collado nace una estrecha pista que, dirección suroeste, va bordeando el valle que nace ante nosotros. Esta pista se adentra en un pinadi, donde llegaremos a un cruce. En él, hacia el sur, tenemos una langa y hacia el oeste, en cambio, una pista. Pasaremos la langa y, nada más hacerlo, nacen dos pistas. Cogeremos la de la izquierda para bajar vertiginosamente hacia la lautada alavesa. De ahora en adelante, lo que debemos hacer es seguir dicha pista sin salirnos en ninguna de sus desviaciones. Cuando lleguemos a un cruce, las rodaduras del camino nos indicarán el camino a seguir. Este es un lugar con mucho encanto. Nada más pasar un riachuelo, en el fondo del valle, nos saldremos de la pista y descenderemos pegados a su rivera por un sendero. Al rato el sendero se convierte en pista. Llegando a un cruce, giraremos a la izquierda para llegar a Barria. En esta zona no os preocupéis si os confundís en alguna de las desviaciones. Ya que, siempre que descendáis dirección sur, como mucho, os desviaréis hasta el pueblo de Larrea o Axpuru.