La brava Sierra de Badaia, de cabo a rabo

Este es un largo recorrido que permite conocer la Sierra de Badaia en su totalidad, desde la ladera sur a la norte. Además, permite ascender a dos cumbres puntuables: Oteros y Ganalto.

Es recomendable hacer este recorrido en bicicleta de montaña por dos razones. Por un lado, porque es un paseo que discurre íntegramente por pista. Y, por otro, porque el recorrido en su parte intermedia es muy plano, ideal para progresar cómodamente en bicicleta. Sin embargo, quien prefiera realizarlo andando, «no problem». Le va a gustar igual.

Nos dirigiremos a la rotonda oeste del pueblo de Langraiz. Allí, veremos un cartel que nos indica la subida a una cantera; lo cogeremos. Ascendiendo por la carretera, llegaremos a una primera cantera que dejaremos a nuestra izquierda. La carretera desciende un poco para continuar dirección este. Enseguida, llegaremos a una segunda cantera que bordearemos por su derecha para seguir subiendo. Para ello, optaremos siempre por la pista que va más pegada a dicha cantera. Tras dejar a nuestra derecha un depósito de aguas, subiremos por la pista, sin salirnos en ninguna de sus ramificaciones.

Al filo de la Sierra

Saldremos a la zona superior de la Sierra de Badaia, dejando atrás el bosque. A nuestros pies, se extienden la larra y los molinos eólicos. La pista desciende un poco para, acto seguido, seguir subiendo hacia el oeste. De esa manera, llegaremos al filo de la Sierra. En el cruce situado en dicho filo, giraremos a la izquierda para llegar a la cumbre del Oteros (1.036 m).

Volveremos sobre nuestros pasos al último cruce. Aquí avanzaremos por el desvío de la derecha para continuar dirección norte por la pista principal. En este tramo, no nos saldremos en ninguno de los desvíos que se dirigen en forma de pista hacia cada molino. Pasaremos por al lado del refugio de montaña Casa Askegi y seguiremos al norte. Después de una potente bajada, llegaremos a un cruce de pistasEn este punto, optaremos por el desvío de la derecha para llegar, fácilmente, al embalse de Flaquiturri. Una vez hayamos alcanzado dicho embalse, la pista se divide en dos; elegiremos el desvío de la izquierda, que nos llevará dirección norte hacia la próxima cumbre.

A partir de ese punto, la pista pierde algo de calidad, pero se puede transitar por ella sin problema. Cuando llevemos más o menos un kilómetro desde Flaquiturri, veremos un desvío a la derecha de la pista marcado con dos mojones y varias flechas de color fosforito; lo cogeremos. Este desvío nos dejará directamente en nuestra segunda cumbre de la jornada, Ganalto (897 m), un gran cortado en su cara norte nos saluda.

Comienzo del Barranco de la Oca

Preparaos, porque todavía nos queda el tramo más espectacular de toda la ruta. Desde la cumbre avanzaremos hacia el este por todo su filo. Pasaremos un pequeño collado para continuar por dicho filo. En el segundo y más marcado collado es donde deberemos salir del cortado. Para ello, nos bajaremos por una pista que nace desde el mismo collado hacia su cara norte. Cuando bajemos dicha pista, deberemos tomar siempre los desvíos de la derecha para adentrarnos en el comienzo del Barranco de la Oca, tan evidente como sublime.

Bajaremos por la encajonada pista que va por el fondo del barranco y paralela a un río. Al final del barranco, atravesaremos una langa. En cuanto la atravesemos, avanzaremos por un sendero a la derecha que nos llevará a la última langa del recorrido. Después, una bajada por pista nos llevará directos a Hueto Arriba, más concretamente a su preciosa iglesia románica.

Finalmente, llegaremos la Sierra brava de Badaia, un auténtico regalo para los sentidos.