JAN. 20 2022 - 13:56h Realizan el primer trasplante de riñones de cerdo editados genéticamente a una persona Una facultad de Medicina de Estados Unidos ha realizado el primer trasplante de riñones de cerdo editados genéticamente a un paciente con muerte cerebral. Las investigadoras lo consideran «un cambio de paradigma y un hito importante» para la solución a la crisis de escasez de órganos. Transplantan con éxito a un humano riñones de cerdo editados geneticamente. (University of Alabama | AFP) NAIZ La Facultad de Medicina Marnix E. Heersink School of Medicine, en Estados Unidos, ha anunciado este jueves el trasplante con éxito de riñones de cerdo modificados genéticamente y de grado clínico en un paciente con muerte cerebral. Según destacan los autores en el 'American Journal of Transplantation', estos resultados positivos demuestran cómo los xenotrasplantes podrían resolver la crisis de escasez de órganos en todo el mundo. Los investigadores de la UAB probaron el primer modelo preclínico humano para trasplantar riñones de cerdo modificados genéticamente a seres humanos. Al receptor del estudio se le trasplantaron dos riñones de cerdo modificados genéticamente en el abdomen después de que se le extirparan sus riñones nativos. Los órganos se obtuvieron de un cerdo modificado genéticamente en una instalación libre de patógenos. «Junto con nuestros socios, hemos realizado importantes inversiones en xenotrasplantes durante casi una década con la esperanza de obtener el tipo de resultados que se han publicado hoy», afirma el doctor Selwyn Vickers, decano de la Facultad de Medicina Heersink de la UAB y director general del Sistema de Salud de la UAB y de la Alianza UAB/Ascension St. «Los resultados de hoy son un logro notable para la humanidad y hacen avanzar el xenotrasplante hacia el ámbito clínico. Con este estudio, nuestros equipos de investigación también han demostrado que el modelo de difuntos tiene un importante potencial para impulsar el campo de los xenotrasplantes», añade. Por primera vez, los riñones trasplantados procedían de cerdos que habían sido modificados genéticamente con 10 ediciones genéticas clave que pueden hacer que los riñones sean aptos para el trasplante en humanos. Destacan que este proceso demuestra la «viabilidad a largo plazo» del procedimiento y cómo podría funcionar dicho trasplante en el mundo real. «Cambio de paradigma y un hito importante» Tal y como aseguran, los riñones trasplantados filtraron sangre, produjeron orina y, lo que es más importante, no fueron rechazados inmediatamente. Los riñones siguieron siendo viables hasta el final del estudio, 77 horas después del trasplante» «Esto representa un cambio de paradigma y un hito importante en el campo de los xenotrasplantes, que es posiblemente la mejor solución a la crisis de escasez de órganos. Hemos cubierto lagunas de conocimiento críticas y hemos obtenido los datos de seguridad y viabilidad necesarios para iniciar un ensayo clínico en seres humanos vivos con enfermedad de insuficiencia renal en fase terminal», destaca la doctora Jayme Locke, directora del Instituto Integral de Trasplantes del Departamento de Cirugía de la UAB y cirujana principal del estudio. La edición de genes en cerdos para reducir el rechazo inmunológico ha hecho posible los trasplantes de órganos de cerdos a humanos, lo que podría ofrecer ayuda a miles de personas que se enfrentan a fallos orgánicos, enfermedades o lesiones. La vida natural de un cerdo es de 30 años, se crían con facilidad y pueden tener órganos de tamaño similar a los humanos. Los riñones de cerdo modificados genéticamente se han probado ampliamente en primates no humanos. Además de las pruebas en primates no humanos, la evaluación de los riñones de cerdo modificados genéticamente en un modelo de investigación preclínica en humanos puede aportar información importante sobre la posible seguridad y eficacia de los riñones en receptores de trasplantes humanos, incluso en ensayos clínicos. La investigación, revisada por expertos, se llevó a cabo para cumplir las normas directamente comparables a las que se aplicarían a un ensayo clínico en humanos de fase I, reflejando cada paso de un trasplante estándar entre humanos, explican los investigadores.