No más acoso escolar: ¿Cómo detectar y prevenir el bullying?

Ansiedad, baja autoestima, retraimiento social o bajo rendimiento son algunas de las consecuencias del bullying, un tipo de violencia que a la larga se convierte en un «problema social» y sobre el que este lunes se ha puesto el foco con motivo del Día Internacional contra el Acoso Escolar.

Uno de cada tres menores sufre acoso en las aulas, según la Unesco, aunque este dato se ha agravado en los últimos años, en opinión de los expertos, por el «mal uso» de las redes sociales, que han multiplicado sus devastadores efectos hasta provocar consecuencias fatales: heridas imborrables o incluso el suicidio.

Según datos de la ONG Bullying Sin Fronteras, en el curso 2021/22 se han detectado en el Estado español más de 11.200 casos de acoso escolar, un 20% más que en el anterior, lo que ha llevado al equipo de salud mental infantojuvenil de la Clínica López Ibor a dar las claves de un problema social que puede derivar en graves consecuencias si no se toman medidas.

Estos profesionales de la salud mental sostienen que hay señales inequívocas que pueden alertar a madres y padres de que su hija o hijo está siendo acosado, como un cambio de conducta, alteraciones del sueño, o si se niega a ir al colegio o a las actividades extraescolares.

El equipo del López Ibor asegura que el acoso escolar provoca una gran variedad de consecuencias para las víctimas, que van desde la baja autoestima o la asunción del rol de víctima hasta cuadros de estrés postraumáticos.

Alerta igualmente sobre efectos en los agresores y en los «observadores»: para los primeros, fracaso escolar, asunción del rol de agresor, dificultades de adaptación social, sentimientos de inferioridad o problemas con la ley; y para los segundos, pérdida de empatía o la normalización de la violencia.

En infantil y primaria

Loli Botía, sicopedagoga y profesora de Educación de la Universidad CEU Cardenal Herrera, sostiene, en una entrevista con Efe, que el acoso va gestándose desde los primeros años, en la etapa infantil y en el primer ciclo de primaria, y que es en el segundo ciclo cuando se dan «casos flagrantes» de bullying. «Si no se interviene va creciendo y acaba en una desgracia», remarca.

Sobre los motivos que llevan a un menor a acosar a un compañero, Botía explica que no hay ninguno concreto, aunque a veces se produce por celos o porque son niños que tienen baja autoestima y, con su comportamiento, encuentran «observadores» que les hacen el juego y les empoderan.

Volviendo con las víctimas, ¿cómo pueden superar las heridas emocionales que les provoca el bullying? Según Botía, es muy difícil ya que les crea «mucha inseguridad en su forma de relacionarse» con los demás. «Las personas que sufren acoso tardan muchos años en olvidarlo si es que lo llegan a olvidar», apostilla.

¿Cómo se puede prevenir?

A la pregunta de cómo se puede prevenir el acoso escolar, Botía responde con claridad: «Todo pasa por la concienciación y la sensibilización del profesorado, incluso de la propia universidad». «No dejarlo para cuando te encuentres un caso, porque eso va hacer que miremos con otros ojos las relaciones sociales que se dan en las aulas», señala.

También los estudiantes y las familias deben fomentar, en su opinión, la «tolerancia cero» a cualquier manifestación violenta y a rechazar los insultos, las humillaciones, las vejaciones o el maltrato físico.

Para ello, considera «fundamental» que los alumnos reconozcan, ya desde la etapa infantil, un «trato inadecuado» hacia su persona y encuentren el apoyo por parte del equipo docente y de su entorno familiar.

De ahí que subraye la importancia de concienciar sobre qué es el acoso escolar, la empatía, la tolerancia, las habilidades sociales y la cohesión del grupo. «Tiene que ser como un riego por goteo, por decirlo de alguna manera», para que cale en el alumnado.

Consejos para madres y padres

La profesora de Educación del CEU Cardenal Herrera aconseja a madres y padres educar a sus hijos e hijas «en mucha autoestima, en la dignidad personal, en que sepan que hay cosas que no tienen que tolerar nunca y en que, si les ocurre, deben comunicarlo inmediatamente».

Precisamente, esta institución educativa ha lanzado una campaña que lleva por título ‘Cibervalientes contra el acoso’ para concienciar sobre el ciberacoso entre los más jóvenes de forma que se genere un debate, remueva conciencias y ayude a prevenir este tipo de situaciones en el entorno digital.