GAIAK
Interview
Leire Aparicio
Cantante de Lorelei Green

«No tiene sentido hacer algo con tanto mimo y no poder contarlo bien»

Lorelei Green acaban de publicar ‘Lava’, un disco donde la banda explora nuevos caminos en canciones que se mueven entre el pop, el rock, el folk, y donde las letras tienen un gran valor. Todo ello, apoyado en el sello personal que aporta el particular registro vocal de la cantante bilbaina.

Leire Aparicio, cantante de Lorelei Green. (Andoni Canellada | FOKU)

¿Para comenzar, cuéntenos cómo se gesta este nuevo trabajo, después de tanto tiempo desde su anterior ‘Aviones de papel’.

Ha pasado tanto tiempo porque había que tocar mucho para recuperarse económicamente; además, como Lorelei Green también hemos sufrido diferentes cambios en estos años. Hubo una especie de ‘disco fantasma’: íbamos a entrar a grabar justo cuando llegó la pandemia y, lógicamente, no pudimos hacerlo. Lo que hicimos después de esa experiencia fallida fue volver a reestructurarnos y, de repente, en vez de cajón flamenco teníamos batería y ya no tenía sentido recuperar esos temas que íbamos a grabar, aunque la verdad es que habría sido un paso importante para explicar cómo se pasa de ‘Aviones de papel’ a ‘Lava’.

¿Recuperó para ‘Lava’ alguna canción de aquel ‘no disco’?

Algunas están, pero ya no son lo que eran, porque en ‘Lava’ ha habido un gran trabajo de construcción… y de reconstrucción. Lo que hemos hecho ha sido pensar como banda, Lorelei Green ya no son unos músicos que acompañan a una cantautora, sino un grupo de personas que cogemos unos temas para ver qué podemos hacer todos juntos con ellos. Algo que a mí también me ha venido muy bien, porque ya tenía ganas de retirarme un poco y ver qué podía pasar con esas canciones. Así que, aunque muchos temas estaban ya construidos, han sufrido cambios que les han hecho crecer muchísimo.

Pero también hay canciones que se han mantenido prácticamente como estaban, porque así lo hemos querido, ya que uno de nuestros fuertes es que venimos de un acústico cuidado y en el disco hacían falta temas para respirar y tomar un poco de aire, y así lo vio también el productor James Morgan cuando le llevamos lo que teníamos preparado. De hecho, hay canciones acústicas que también tenemos arregladas, por si surge la ocasión de tocarlas en un formato más eléctrico.

«Al escuchar el disco, de repente veo que me ha quedado pendiente sacar todavía más artillería. Me siento muy macarra y me gustaría que eso se reflejara»

 

Antes de grabar este trabajo, ya habían estado tocando juntos. ¿Cómo se crea y qué aporta a sus canciones la formación actual de Lorelei Green?

La banda se ha creado de una manera muy orgánica, en ningún momento he ido buscando algo concreto, sino que las cosas han ido sucediendo de una forma muy fluida; algo que, por cierto, me gusta, porque creo que, en el momento que empiezas a elegir demasiado con la cabeza, las cosas no suelen salir como piensas. Como te digo, todo ha ido saliendo casi de casualidad, en principio estábamos Álex García y yo, que somos amigos y tocábamos juntos por placer hasta que vimos que nos complementábamos a la perfección y podían salir cosas interesantes trabajando juntos; Ricardo De Lucas llegó justo cuando nos habíamos quedado sin contrabajista, y a Josu Polanco le llamamos cuando nuestro anterior percusionista tuvo que dejar la banda. Es un batería extraordinario que nos ha dado muchísima versatilidad. Lo más importante es que, al venir todos de universos musicales totalmente diferentes, cada uno aporta lo suyo a la banda y todos nos vamos contagiando, y nos divertimos mucho tocando juntos.

Lo que se percibe al escuchar ‘Lava’ es la libertad absoluta con la que se ha hecho este disco, ya que escuchamos soul, folk, rock e incluso algunos pasajes stoner…

Queríamos investigar un poco y hacer cosas nuevas, y en el momento que le enseñamos la maqueta con lo que teníamos a James nos dijo a qué le recordaba, nos propuso diferentes caminos y, sobre esas ideas, fuimos trabajando; lo que nos apetecía era experimentar y que las canciones fueran variadas, para sentir que, de alguna manera, estaban en el disco las diferentes formas de ver la música de cada uno. Además, hoy en día la gente escucha las canciones sueltas y nos apetecía hacer un disco para escuchar de principio a fin sin aburrirse.

(Andoni CANELLADA | FOKU)

 

¿Siente que, por fin, ha sacado al exterior esa faceta más ‘macarra’ que muchos y muchas le demandábamos?

Sí, y todavía podía haberlo sido más, ¿eh? (risas). Al escuchar el disco en diferentes fases, de repente veo que hay muchas cosas que podría cambiar y que me ha quedado pendiente sacar todavía más artillería. Como tú dices, yo me siento muy macarra y me gustaría que eso se reflejara bien. En una entrevista me dijeron que mis canciones sonaban ‘muy femeninas y frágiles’ y me dieron ganas de pegarme un tiro, porque, primero, ¿qué significa que una canción es femenina?... además, mis canciones creo que son de todo menos frágiles, yo me crezco muchísimo cantándolas y todas las letras, hasta las más íntimas, son de ir hacia adelante, aunque estés en la mierda.

Otra cosa que se nota es que ha disfrutado mucho haciendo las voces.

Muchísimo. Tenía muchas ganas de jugar con armonías y demás, y quería hacerlo yo misma porque lo disfruto muchísimo; James y mis compañeros me dieron vía libre para trabajar esta parte, porque el tipo de voces que hago no son las más convencionales, a veces son muy oscuras. Pero creo que ese es ya mi sello personal y que a las canciones también les ha dado otra dimensión. Metiendo diferentes capas se crean nuevos escenarios y era algo que apenas habíamos investigado, por eso, en este disco hemos metido muchísimas voces que han aportado cosas diferentes.

Después de verla en directo y de escuchar el disco, ya solo puedo imaginármela en formatos extremos: sola con una guitarra o con la banda al completo. ¿Podrían estas canciones nuevas, a pesar de esos arreglos, funcionar también en acústico?

Por supuesto. No voy a dejar de tocar sola, eso lo hablaba hace poco con James Room: cuando tocas con gente y te escondes de alguna manera en la banda, puedes llegar a perder seguridad en ti misma, porque la banda acompaña y es increíble, pero delegas cosas que luego vas a necesitar cuando te veas tocando sola de nuevo.

«En una entrevista me dijeron que mis canciones sonaban ‘muy femeninas y frágiles’ y me dieron ganas de pegarme un tiro, porque, primero, ¿qué significa que una canción es femenina?»

En cuanto a las letras, ¿le da mucha importancia a la parte lírica en las canciones?

Siempre he dado muchísima importancia a las letras, porque para mí siguen siendo la espina dorsal. Aunque no siempre es necesaria una letra para hacer canciones, de donde yo vengo los textos son fundamentales, porque quiero contar cosas muy concretas; nunca me cargo una letra en pro de la canción, lo que hago es buscar la forma para que caminen juntas. En general, la música es la que se acomoda a la letra y cuando no es así, doy mil vueltas hasta que todo encaja.

En cuanto a las temáticas de las canciones, siempre te encuentras diferentes interpretaciones de las letras y, aunque yo no lo busco, una cosa es lo que tú envías y otra lo que el oyente recibe. Esa es una de las cosas maravillosas que pasan en la música.

La grabación del disco ha estado, en parte, financiada a través de una campaña de mecenazgo. ¿Está contenta con el resultado de esta iniciativa?

Lo tuvimos que hacer así, en parte porque no podíamos sacarlo adelante sin saber si había un interés real o un apoyo. Lo que hicimos fue llamar a la puerta a todas esas personas que en algún momento de la historia de Lorelei Green han estado ahí, para ver si seguían estando y para ver si, después de este tiempo de letargo, todavía tenían interés en lo que hacíamos. Por nuestra parte, había una necesidad imperiosa de grabar y publicar estas canciones para contar quiénes éramos y qué hacíamos en ese momento; llevábamos mucho tiempo dando conciertos en los que, prácticamente, no tocábamos canciones de ‘Aviones de papel’… de hecho, cuando venía gente a preguntarnos después de los bolos a ver si teníamos discos, no queríamos sacar aquél, porque sentíamos que ya no nos definía como músicos. 

Después del exitoso estreno del disco en directo en Bilborock, ¿tienen ya previstos más conciertos en un futuro inmediato?

Sí, ahora estamos con los envíos de la campaña porque queremos responder a toda esa gente que nos ha apoyado, y en cuanto terminemos con ello, nos pondremos a buscar bolos porque, además, queremos que sean conciertos en los que podamos presentar en buenas condiciones estos nuevos temas, porque pensamos que no tiene sentido hacer algo con tanto mimo y no poder contarlo bien.

De momento, ya está confirmada la presencia de la banda en el Bilbao Legends festival. ¿Qué se siente al tocar en un evento tan importante?

Ahí está nuestro nombre en chiquitín al lado del de otros grandísimos artistas (risas)… pero creo que, hasta que no me vea ahí, no me lo voy a acabar de creer del todo; lo bueno es que ha sido una inyección de motivación muy fuerte para la banda tener eso en el horizonte cercano y ver que se ha valorado el trabajo que hemos hecho.