AUG. 25 2024 No, el terror de A24 no es universal Cartel de «The Front Room», película de terror de A24 de los hermanos Sam y Max Eggers, protagonizada por la cantante Brandy Norwood. Mariona Borrull En una cartelera poblada de gatos molones y pocas liebres, la casa reina del terror aún vive anclada en el imaginario limitado made in USA. Y, por increíble que parezca, ello ha resultado en una película que a día de hoy, sí, aún puede pasar injustamente desapercibida por cuestiones cien por cien culturales. Tratemos de localizarla. “The Front Room” (“La salita de estar”) crece sobre el suelo macarra de A24 tras los éxitos de bolsillo de ‘‘Habla conmigo” y “Sangre en los labios”. La película adapta un cuento corto de Susan Hill, autora que revitalizó el terror gótico en Estados Unidos y que aún es prácticamente desconocida aquí. En el cine, os sonarán la mala adaptación que se hizo de “La mujer de negro” con Daniel Radcliffe (2012), o “El señor de la gran mansión”, con Jean Rochefort y Dominique Blanc (1988), basada en su fantástica novela “I'm the King of the Castle”. Buscadla si sabéis inglés y os gustan los cuellos altos y los suelos que crujen… En “The Front Room”, adaptada por la misma Hill, acompañaremos a Belinda (Brandy Norwood), una mujer embarazada que debe acoger en casa a su suegra racista, loca y probablemente diabólica. Un título alternativo podría ser: “La salita de estar mal”. El film seguirá los esquemas del gato y la rata (la rata es la suegra, naturalmente) de anteriores éxitos con la vejez por monstruo, como “X” de Ty West o “La visita” de M. Night Shyamalan, y el embarazo como época de trascendencia pantanosa, como “Madre!” de Darren Aronofsky o todas las herederas de “La semilla del diablo”. En el terror por fachorracismo, un campo definitivamente más explorado en Estados Unidos, el tráiler sitúa la película de A24 en la línea rasposa y violenta de Jordan Peele (“Déjame salir”) o Little Marvin (“Them”)... También habrá que mapear a la protagónica Brandy Norwood, cantante de R&B localmente conocida por “The Boy Is Mine”, a dúo con Monica, o “Have You Ever?” y que trató de abrirse camino en la pequeña pantalla a finales de siglo. En 1997, Whitney Houston y Whoopi Goldberg la arroparon como la primera Cenicienta negra en el musical homónimo de Robert Iscove (“Miami Vice”), pero como las puertas del estrellato no acabaron de abrirse, ya en 1998 dio su primer paso como reina del grito. Fue con ‘“Aún sé lo que hicisteis el último verano”. Si aquí no vivimos su papel como un regreso, es porque nunca la esperamos. Debutan en la dirección los Eggers, hermanos entre ellos y con Robert (ahora mismo rematando “Nosferatu” para su estreno en Navidad). Sam y Max Eggers han trabajado antes con su hermano mayor: Max fue coguionista de “El faro” y Sam fue asistente de producción en “La bruja”. Qué tanto nos divertirán con una película que a nuestras salas llega sin ningún andamio cultural, no más allá del sello A24… Eso habrán de ganárselo con méritos propios.