OCT. 22 2017 UNA MIRADA AL MUNDO A la sombra del bosque vertical 978_7K_basoetxe Celine Cornu Las dos torres Bosco Verticale (Bosques Verticales) del arquitecto italiano Stefano Boeri, con más de 20.000 plantas y árboles, o sea el equivalente de dos hectáreas de bosque, son un concepto de éxito mundial, con imitaciones en todo el planeta, desde Holanda a China. En el barrio milanés de Porta Nuova, la gente mira absorta los dos rascacielos boscosos, donde viven algunos famosos como el futbolista croata Ivan Perisic. Alerces, cerezos, manzanos, olivos, hayas... En cada balcón crecen decenas de plantas o árboles elegidos y posicionados en función de su resistencia al viento y de sus preferencias en materia de luminosidad o humedad. Este proyecto «nació de mi obsesión por los árboles» y de una reflexión sobre «la manera en la que podían convertirse en componente esencial de la arquitectura», explica Stefano Boeri. También es una iniciativa ecológica. «En 2007 estaba en Dubái y miraba esa ciudad en medio del desierto, con más de doscientas torres de vidrio que multiplican el efecto del calor», recuerda. Así nació la idea de un edificio que pueda, «además de acoger la vida, contribuir a reducir la contaminación de la ciudad, porque los árboles absorben las micropartículas y el CO2. Las ciudades producen actualmente alrededor del 75% del CO2 presente en la atmósfera y llevar más árboles a la ciudad significa combatir al enemigo en el lugar». Boeri trabajó con botánicos durante tres años para crear un vivero con mil árboles «que fueron ‘educados’ para crecer en condiciones» específicas. Hubo muchos desafíos: el tamaño y la estructura de los balcones y parapetos destinados a acoger la vegetación, la forma de “fijar” las raíces de los árboles o el peso y la composición de la tierra. Ahora su equipo trabaja en una decena de proyectos de Bosco Verticale en el mundo: Lausana (Suiza), Utrecht (Holanda), Sao Paolo (Brasil), Tirana (Albania)... En Eindhoven (Holanda), el objetivo es construir una vivienda social. El Bosco Verticale se compone de dos torres de 110 y 76 metros. Aunque no es el único edificio con cubiertas vegetales. Hay otros, como la Tower Flower de Singapur. En China hay dos torres en obras en Nanjing, un hotel proyectado en Shanghái y planes para edificar una «ciudad forestal» de 200 edificios en Liuzhou.