7K - zazpika astekaria
CONSUMO

Un nuevo año


Comienza el año con la repetición de las jugadas en el tablero del consumo. No hay ninguna nota que altere las reglas establecidas, así que resulta fácil vaticinar lo que irá pasando en este recien estrenado 2018 sin necesidad de que medie una bola de cristal o un horóscopo.

Algo clásico es la subida de los productos y servicios básicos. La electricidad se apunta a esta tendencia caiga quien caiga, pues no entiende de hogares con o sin posibilidades, ante la mirada impasible de un Gobierno que, lejos de intervenir la escalada, sigue gravándola con un 21% de IVA, un tipo impositivo impropio para un servicio esencial.

De la mano de la luz viene la subida del gas doméstico, una paradoja para los acogidos a la tarifa de último recurso (TUR). En suma, que la mayoría de usuarios pagaremos un subidón de nada menos que del 6,2%. Aquí la culpa, dicen, la tiene el mercado internacional, que anda siempre bailando su propio chachachá.

Le seguirán la telefonía y el transporte de peaje que, como efecto dominó, encarecerá todo lo que se mueve por carretera, más allá de los productos locales o de kilómetro cero. Nada nuevo en este juego del Monopoly en el que andamos metidos: la banca siempre gana. Y por defecto, la mano invisible de la Administración, siempre con afán recaudatorio pero disfrazada de la moralina sempiterna de “seamos solidarios”.

En definitiva, que las alegrías de quienes consiguieron mejoras salariales para el 2018 se desvanecerán con tanto reajuste en la cesta de la compra. Lo malo es que no todos habíamos peleado en mesas de negociación, pero, ya ven, nos llevamos la peor parte. Y es que acaba pasando lo de siempre: «Si no quieres taza, toma taza y media».

A lo largo del año se irá animando el cotarro con nuevas incorporaciones al alza, tiempo al tiempo. Por ahora, y como más inmediata, llega la panacea de las nuevas rebajas, que “paliarán” la cuesta de enero. Es lo que toca y nosotros picaremos, comprando como si se acabara el mundo. Admitámoslo, somos consumidores incorregibles.