Poliça & Stargaz

La imagen retrocede dos años atrás y se sitúa en 2016 en Berlín. En una sala de estar se encuentra André de Ridder junto a los miembros de su colectivo musical Stargaze, a los cuales se les ha unido Poliça, el grupo de música electrónica de Minneapolis liderado por el cantante Channy Leaneagh y el productor Ryan Olson. Su encuentro fue promovido por la Orquesta de Cámara de St. Paul de Minnesota, con la esperanza de poder trazar una colaboración entre géneros tan dispares como la electrónica y la música clásica. El resultado es “Music For The Long Emergency”, que ahora ve la luz.

Los mundos de ambos grupos se cruzan en este disco de manera coherente y magistral. Los paisajes sonoros electrónicos de Poliça están llenos de espacios para ir completando; las secuencias y la forma de montar las canciones se asemejan a la de una compositor clásico que va editando las texturas que componen cada tema.

De Ridder era consciente de lo que Stargaze podía aportar a Poliça. Después de haber trabajado con músicos de diferentes ámbitos, que van desde Owen Pallett hasta Julia Holter pasando por Matthew Herbert, Mica Levi y Deerhoof, el director alemán se ha acostumbrado a amoldar estilos y géneros. El colectivo orquestal, integrado por siete músicos, emplea sus virtudes a favor de la canción donde ejecutan con gran habilidad arreglos orquestales gracias a su correcta combinación de instrumentos.

Son vanguardistas, un concepto del que hacen uso acercando sus singularidades a la música pop y consiguiendo un resultado variado y enriquecedor donde la experimentación está presente a lo largo de los siete temas que componen el álbum.

El pasado 9 de noviembre, la banda afincada en Berlín aterrizaba en Estados Unidos para terminar de perfilar la colaboración entre ambos grupos. Allí encontraron a los miembros de Poliça en un estado de confusión, tambaleándose por la victoria electoral del presidente Trump el día anterior. El álbum es un alegato, una respuesta artística a aquel “shock” que derivó en “How Is This Happening”, una pieza de diez minutos que responde a sus sentimientos más profundos con cuerdas que van en cascada, sonidos de sintetizador deformados y percusiones resonantes.

La elección de Trump pudo haber alterado el estado de ánimo de las sesiones de grabación, aunque no el objetivo subyacente del proyecto de fusionar las sensibilidades progresivas de estos dos grupos procedentes de Estados Unidos y Europa, integrando elementos electrónicos y clásicos.

CD AIPAGARRIA

Submotion Orchestra

“Kites” •&flexSpace;

SMO recordings, 2018 •&flexSpace;

Electrónica-jazz

Muchos consideran que la música de la Submotion Orchestra es medicina para la mente. La verdad es que cada canción es una experiencia: facilita la introspección y ayuda a la reflexión. Planteado como un viaje sónico, encontramos crescendos épicos y un ambiente hipnotizante donde la música electrónica se funde con el jazz acompañado de sus inconfundibles líneas de bajos profundos, fluidos sintetizadores y encantadoras armonías vocales que sellan su identidad. Formados hace diez años en la activa escena de Leeds, su inimitable sonido atrae influencias tanto del jazz como de la música ambiental, el soul y las frecuencias más bajas que proceden de la escena del dubstep.