Salir
A pesar de la crisis sanitaria, la normalización de nuevas medidas de convivencia ha hecho que poco a poco vayamos retomando los espacios de relación habitual. El riesgo sigue estando latente pero, a pesar de eso, hemos sido capaces de sobreponernos y adaptar nuestras formas de ocio. Los meses estivales siempre concentran la mayor cantidad de desplazamientos. Nuestro modelo vacacional incluye en muchas ocasiones movilidad entre comunidades, en búsqueda de alicientes que puedan ayudarnos al descanso físico y mental que tanto nos merecemos. Desde el surgimiento del turismo y con la evolución de las ciudades, el arte contemporáneo ha ido asumiendo lugares de protagonismo en la planificación urbana. La programación cultural es un elemento más en los destacados de las agendas de las principales capitales y es un punto atractivo que acapara muchos de los motivos que las hacen interesantes. Como todos los años, desde esta página realizamos una reseña en la que enumeramos algunas de las propuestas más destacables para todas aquellas lectoras que quieran dedicar parte de sus vacaciones a la visita de exposiciones. Esta semana nos centramos a nivel estatal para en la siguiente entrega dar el salto al panorama internacional.
Barcelona es una de las grandes capitales. Su carácter internacional la hace siempre estar repleta de oferta cultural que sin duda abarca tantas opciones como gustos. Sin embargo, hoy queremos destacar la muestra que el CCCB (Centre de Cultura Contemporània de Barcelona) inauguró el pasado día 12 de junio. “Ciencia fricción. Vida entre especies compañeras” es un proyecto comisarial a cargo de María Ptqk (Bilbo, 1976). Un proyecto que versa sobre las relaciones entre las especies que habitan el mundo y la idea de simbiosis y red de convivencia frente al dominio hegemónico de la humanidad. Para esto se sirve de varias disciplinas, obras artísticas en diferentes soportes, instalaciones inmersivas, realidad virtual, el cine de vanguardia, así como piezas de divulgación científica. Sin salir de la capital catalana, encontramos en La Virreina-Centro de la imagen, la primera gran retrospectiva dedicada a Marcelo Expósito (Puertollano, 1966). Hasta el 26 de septiembre “Nueva babilonia. Designar o no un trabajo como arte es una decisión táctica” nos introduce en el legado de Expósito. Artista, activista y teórico de gran recorrido desde la década de los 80. Algo parecido ocurre con Madrid. La cantidad de centros e instituciones que conforman su tejido expanden constantemente su abanico de posibilidades. Sin embargo ponemos el foco en “Marginalias”. La muestra que el museo MNCARS le ha dedicado a Ida Applebroog (Nueva York, 1929). Cinco décadas de dedicación y compromiso feminista de esta artista multimedia que pueden visitarse hasta finales de septiembre.
El Centro Galego de Arte Contemporánea (CGAC) inauguró una exposición dedicada al artista David Lamelas (Buenos Aires, 1946). Una figura clave en el arte conceptual y en el panorama artístico argentino de los años 60. Una importante retrospectiva que nos permite acercarnos a la carrera de uno de los artistas vivos más relevantes de su generación. Siguiendo este hilo, no se entendería el arte conceptual en el Estado español sin mencionar a Isidoro Valcárcel Medina (Murcia, 1937). Posiblemente uno de los artistas vivos más importantes e interesantes. El MUSAC de León programa “Arquitecturas prematuras”. Una recopilación de algunas de sus propuestas arquitectónicas más importantes como la conocida “Torre para suicidas” o “edificio para parados”. Planos y proyectos inviables que desafían los convencionalismos sociales.
Por último, el IVAM de València pone en valor la figura del muralista, escritor y cartelista Josep Renau (València 1907, Berlín Este 1982). Su militancia comunista y su afiliación con el bando republicano le llevó al exilio al final de la Guerra del 36. Su trayectoria vital y las diferentes etapas que la conforman, tuvieron consecuencias en su producción artística. “Los exilios de Renau” da buena cuenta de su compromiso vital a través de su trabajo.