Jone Buruzko
IRUDITAN

«El chopo indonesio»

Un joven sube por un poste cuya parte superior está repleta de artículos colgando mientras intenta agarrar alguno de ellos. Eso es el panjat pinang, un juego tradicional que se practica en Indonesia y consiste en trepar por el tronco –generalmente son árboles de nueces de areca que han sido pelados y colocados en las plazas de ciudades y pueblos– y atrapar lo que pueda. La empresa es complicada, estos postes están muy engrasados, por lo que los participantes resbalan una y otra vez en el intento de agarrar uno de esos bolsos. Así que las caídas, los golpes e incluso las fracturas son habituales por lo que para minimizar sus efectos a veces los postes se instalan sobre agua o barro. Salvando distancias y diferencias, recuerda al chopo, el árbol de San Juan, que se instala en Euskal Herria la noche más corta del año. En «el chopo indonesio», los concursantes compiten en equipos buscando un rato de diversión y esa recompensa que en su versión popular se traduce en utensilios de cocina, suministros para el hogar y objetos sencillos, aunque cuando se mete la televisión por medio los regalos suben el nivel y hasta se cuelgan cupones canjeables por televisores y automóviles. El panjat pinang es uno de los platos fuertes del Día de la Independencia de Indonesia, que anualmente se celebra el 17 de agosto. Esta imagen fue tomada ese día en Denpasar, la capital de la isla de Bali. Para algunos es entretenido y enriquecedor porque se potencia el equipo, para otros es controvertido ya que surgió en la época colonial cuando los holandeses se divertían viendo como los indonesios pobres intentaban conseguir algo.