¿Refrescante, divertido o colorido? Cualquiera de las tres definiciones se ajusta a esta imagen tomada en un parque acuático chino que ha terminado convirtiéndose en un clásico del verano. La secuencia se repite anualmente cuando para combatir las altas temperaturas que azotan durante estos meses medio mundo, el personal se refresca en mares, lagos, ríos, pantanos o piscinas. En las zonas del gigante asiático son especialmente partidarios del flotador, así que la población se zambulle por diversión y para hacer frente al calor entre esos artilugios de plástico, corcho o pvc convirtiendo el sitio en un estallido de color. Esta foto aérea está tomada en una pileta del parque acuático de Zhengzhou, la capital de la provincia de Henan, un lugar donde los veranos son largos y calurosos. Incluso emblemáticos recintos como el Cubo de Agua, la legendaria piscina que acogió los Juegos Olímpicos de 2008 y donde Michael Phelps se colgó ocho medallas de oro, sucumbió a la tentanción de convertirse al año siguiente en piscina veraniega abierta al público, previo paso por taquilla. Pequineses y turistas disfrutaron entonces de un escenario legendario que sigue reciclándose dependiendo del momento. Aprovechando la instalación, durante los últimos Juegos de Invierno celebrados en Pekin, este 2022 se reconvirtió en pista de curling. Con el mercurio superando los 40 grados, estos recintos son la alternativa, con o sin flotador.