Una multitud recorre Iruñea por una Euskal Herria libre y soberana

Más de diez mil personas participaron ayer en la manifestación convocada por la red Independentistak en Iruñea con motivo del Aberri Eguna. En un ambiente festivo, que se extendió por la tarde por las calles de Alde Zaharra, reclamaron que la única alternativa posible para Euskal Herria en el siglo XXI es la independencia.

Más de 10.000 personas, según el recuento realizado por GARA, participaron ayer en la manifestación convocada por la red Independentistak en Iruñea con motivo del Aberri Eguna para reclamar que la independencia de Euskal Herria es la mejor garantía para su futuro.

El portavoz de Independentistak, Txutxi Ariznabarreta, subrayó este mensaje en declaraciones a los medios antes de que comenzara la manifestación desde los cines Golem de la capital navarra. «En pleno siglo XXI, la independencia es nuestra única alternativa. Los posibilismos autonomistas del siglo pasado ya no sirven. Nuestro futuro no tiene encaje en los estados español y francés», destacó.

Tras señalar que en estos momentos parece que existen las condiciones objetivas favorables para acceder a la plena soberanía, Ariznabarreta lamentó «que estemos retrasados en la elaboración del libro blanco de la independencia. Tarde o temprano, la independencia será la única opción y debemos dar ya pasos en esa dirección».

La marcha partió encabezada por una gran ikurriña y al son de los txistularis para, tras recorrer las avenidas de Baiona y del Ejército, llegar al paseo de Sarasate. El color verde de la estrella de Independentistak y la ikurriña fueron los tonos dominantes, aunque también estuvieron presentes los colores de banderas de naciones solidarias como Països Catalans, Occitania, Aragón, Galiza y Bretaña.

Una pancarta con el lema “Independentzia” que se situó detrás de la ikurriña y que fue portada por los convocantes resumía la reclamación de todos los congregados ayer en la capital navarra.

Una vez concluido el recorrido, Roberto Tananta, perteneciente al pueblo amazónico kukama-kukami y miembro de Independentistak, intervino en su lengua de origen y en euskara en el acto político del paseo de Sarasate, como prueba de que el independentismo vasco acoge a personas de distintas identidades. Tananta explicó cómo antes de la llegada del colonialismo y el capitalismo, en su pueblo no había una palabra para nombrar al pobre, pero, apostilló, tuvieron que inventarla. Tampoco existe una palabra para independencia, pero sí para definir la libertad. Y eso, la libertad, fue lo que reclamó para Euskal Herria.

Garbiñe Bueno subrayó por su parte que «la dependencia nos empobrece y nos hace menos libre. Se han cargado la CAN y los servicios públicos, no plantan cara al machismo, se enriquecen a costa del pueblo, han aumentado el paro, han multiplicado las obras innecesarias, han desahuciado, han llevado a miles de personas al límite, han perseguido nuestra lengua, dictan nuevas leyes represivas como la Ley Mordaza. Este es el balance de la dependencia, ese el precio de la subordinación».

Desde el estrado del paseo de Sarasate, se mostró asimismo solidaridad con los perseguidos por mostrar la ikurriña en Iruñea, donde, recordaron, «además de ser bandera nacional es una enseña de libertad».

Al inicio de la manifestación, el candidato de EH Bildu para presidir Nafarroa, Adolfo Araiz, destacó que la marcha de ayer «fue la voz de Navarra, la voz del derecho a decidir sobre todo lo que nos afecta, sin ningún tipo de injerencia ni imposiciones desde Madrid. Ha llegado el momento del cambio en el que Navarra va a tener capacidad de decidir su futuro económico, social y político. Es un camino que terminará en un Estado vasco».