APR. 07 2016 Europa League Puede pasar cualquier cosa Valverde y Emery coinciden en que no hay favorito, mientras Aduriz ve al equipo listo para «competir en este tipo de situaciones». Joseba VIVANCO «Voy a dar un pronóstico: puede pasar cualquier cosa». La frase es del técnico inglés Roy Atkinson y sirve para sintetizar, alejado de cualquier sentimentalismo, la antesala de este duelo continental al que Athletic y Sevilla llegan, a juicio de sus protagonistas, con un favoritismo repartido a partes iguales. Ninguno de los dos quiere asumir ese cartel porque saben que en una noche europea, en una eliminatoria con el goloso premio de unas semifinales en puertas puede pasar cualquier cosa. A priori, dos contendientes con pareja trayectoria liguera, dos bloques a semejanza de sus entrenadores, muy trabajados, competitivos, con experiencia reciente en estas lides, difíciles de ganar... Es verdad que se juega a ida y vuelta, que la máxima como siempre es que el visitante no te marque y tú lo hagas. Incluso un 1-0 sirve, como dan fe los rojiblancos tras su cruce ante el Valencia. Espadas en alto en la que se requerirá un San Mamés volcado, entregado, porque está en juego otro hito histórico para los leones. Tal día como ayer, pero 39 años atrás, el Athletic empataba en Bruselas en la ida de las semifinales de la Copa de la UEFA ante el Racing White. Iribar, Lasa, Gisasola, Goikoetxea, Escalza, Oñaederra, Garay, Rojo II, Churruca, Amorrortu y Rojo I. Desde entonces, solo una vez más, en 2012, los bilbainos volvieron a vivir algo similar y, como entonces, alcanzaron la final. De ahí la trascendencia de lo que hay en juego. De ahí que como sostuviera ayer un distendido y relajado Ernesto Valverde «este sea un partido de estos que estamos soñando poder jugarlos cada temporada, desde el 1 de julio estamos esperando poder llegar a estos dos partidos. Nos lo hemos ganado a pulso los dos equipos». El técnico rojiblanco, que fiel a su costumbre no quiso dar pistas sobre si jugará Bóveda, o Williams, incluso bromeó con si saldrá con dos centrales o tres, lo que tiene claro es que «llegados a este punto el favoritismo no importa. A priori, el partido es tremendamente igualado. Hay que respetarles porque son los vigentes campeones y eso da idea de que tienen tomada la medida a la competición y de la ilusión por ella», sostuvo. Choque parejo en el que el Athletic deberá «intentar minimizar los daños que te pueda hacer el Sevilla», y a partir de ahí «importante ganar y no recibir goles». Eso sí, Valverde duda de que «la eliminatoria se vaya a resolver aquí». No obstante, más allá del potencial futbolístico y las armas de cada cual, el factor emocional tendrá su cuota de responsabilidad en lo que pase en estos primeros 90 minutos. Lo dijo el entrenador rojibanco, «somos futbolistas por llegar a partidos como estos. No podemos dar un paso atrás. Y nos lo creemos, vamos a ir a por todo. Arriesgar todo, la oportunidad está ahí para quien la coja». El Athletic la quiere coger, y si no, las palabras de Aritz Aduriz: «Estamos muy, muy, muy metidos en la importancia de la eliminatoria, estamos super ilusionados, queremos hacer algo grande y estamos con muchas ganas». O más claro... Valverde: «Queremos hacer historia». Emery: «San Mamés va a vibrar» Al otro lado, un motivado Unai Emery, quien prevé un partido «de mucho contacto y mucha disputa», pero una eliminatoria al «50 por cien» para la que el guipuzcoano recupera para la banda izquierda al danés Krohn-Dehli, ya recuperado de su lesión, y se prevé que alinee al francés N´Zonzi, que reapareció el domingo, junto al polaco Krychowiak en el medio campo, para dejar la banda derecha a Vitolo, con el argentino Éver Banega o bien Iborra en la media punta, y Gameiro –que lleva 22 goles entre todas las competiciones y un porcentaje de remates entre los tres palos del 63%, por un 58% de Aduriz– arriba. A juicio del técnico sevillista, «San Mamés va a ser un escenario en el que se va a vibrar, un partido de mucha intensidad que va a requerir una gran preparación mental». Y, precisamente, a esa característica tan recurrente en duelos de esta envergadura se refirió también Aduriz cuando defendió que «hemos evolucionado mucho estos años, cada vez tenemos una mentalidad más competitiva en este tipo de situaciones». Las cartas están echadas. El Athletic no ha perdido ninguno de sus siete partidos europeos en su feudo este curso, en tanto el Sevilla no sabe lo que es ganar fuera ni en Liga ni en Europa League. Pero hablamos de 180 minutos, de momento en juego los primeros 90 y hasta entonces, hasta el pitido inicial, como dijo aquél, «todavía no empezó el partido, puede ganarlo cualquiera de los dos». Aduriz: «El público es soberano» «Han sido 17 años maravillosos y la verdad que va a ser muy extraño enfrentarte al equipo en el que he estado toda mi vida. Me siento muy, muy orgulloso de haber crecido en un club tan grande como el Athletic, de haber jugado tantos partidos en el Athletic, haber hecho tantos goles y haber vestido esa camiseta ha sido siempre un honor», comentaba Fernando Llorente esta misma semana. El riojano ha entrado en la convocatoria de Unai Emery, pero la realidad es que solo ha participado en uno de los últimos ocho encuentros de los andaluces, en ninguno de los cuatro últimos. Es más, ante la Real Sociedad, con el marcador en contra, el técnico guipuzcoano prefirió tirar de Iborra para apuntalar el ataque en lugar de Llorente. Pero su visita no va a pasar desapercibida hoy en San Mamés, aunque habrá que ver en qué grado. Lo que en ningún modo piensan en el vestuario rojiblanco es que eso vaya a distraer a una grada que esperan sea «clave para animar», decía Ernesto Valverde, «que nos apoye cuanto más mejor, porque los necesitamos», sostenía Aritz Aduriz. ¿Y Llorente qué? A ambos se les interrogó ayer, –nunca mejor utilizado el término– sobre cómo recibirá el público de San Mamés al exleón. Y ahí, ninguno se mojó, o sí. El técnico tiene claro que «el público recibirá a Llorente como crea conveniente». Para el delantero, «yo no soy nadie para decir cómo tiene que ser recibido, el público es soberano». Si alguno quería una declaración de amor, se quedó con las ganas. Unai Emery también fue cuestionado sobre la presencia del exrojiblanco, para defender que «Fernando está muy agradecido a su etapa en el Athletic. Estamos contentos con él y ya tienen una madurez a la hora de afrontar partidos», aunque, no obstante, asumió que tendrá «una atención especial» por parte del público. «La presencia de Llorente solo puede influir por lo que haga en el campo», concluyó finalmente Valverde. Un aliciente más de los muchos que rodean a un partido para poder hacer historia.J.V. MUNIAIN ENTRA Iker Muniain es la novedad en una convocatoria de la que se cae Mikel Rico y tampoco entra Ibai Gómez. Valverde tendrá que cubrir las ausencias de Laporte y Raúl García. IAGO LO JUEGA TODO Iago Herrerín es uno de los cuatro jugadores que disputan los cuartos de final que ha jugado los 900 minutos que se llevan jugados en la competición. Víctor Ruiz del Villarreal, Costa del Sparta Praga y el portero del Liverpool Mignolet son los otros tres.