El Aviron comienza a sembrar dudas
Baiona perdió 9-21 ante Montpellier tras jugar un muy mal partido.
El Aviron Bayonnais se desinfla. Tras superar con muy buen juego en la primera jornada al potente Toulon y empatar en la segunda jornada en casa, le han acompañado tres derrotas consecutivas y la de ayer en el Jean Dauguer ante el Montpellier, 9-21, va a escocer, ya que las sensaciones que ofreció el cuadro de Baiona no tienen nada que ver con las que dejó en las dos primeras jornadas. Al igual que la semana pasada, ayer también tuvo un bajón importante en la segunda parte, algo que tendrán que arreglar cuanto antes.
El choque no fue brillante y los 15.000 espectadores que acudieron a ver el duelo no lo pasaron muy bien. Cuando el encuentro es pobre y cuando se juega muy lejos de la línea de ensayo, normalmente son los lanzamientos a palos los que deciden el envite y es lo que sucedió ayer en el Jean Dauguer.
En el juego, el conjunto visitante fue más y por ello tuvo más opciones en los lanzamientos a palos, logrando siete. El Aviron solo convirtió tres y los hizo por mediación de Du Plesis. Tras la derota de ayer, el conjunto labortano seguirá en los puestos de descenso y está claro que tras tres derrotas consecutivas los blanquiazules necesitan cuanto antes la victoria.
Cittadini, Arganese, Choirat, Oulai, Taele, Monribot, Chouzenoux, Beattie, Rouet, De Plessis, Fuster, Lovobalavu, Bourhis, Martial y Tisseron formaron el quince inicial.
Derrota del Gernika
Arrancó la División de Honor y el Bizkaia Gernika perdió 13-17 ante el Quesos Entrepinares, el vigente campeón y el máximo candidato para llevarse el título liguero, en el campo de Urbieta. Pese a la derrota, los verdinegros ofrecieron buenas sensaciones y además se llevaron el punto defensivo, aunque viendo cómo fue el partido se antoja un premio muy pequeño.
Los vizcaínos realizaron una excelente primera parte, lo que les permitió llegar al descanso con un claro 13-0 por delante en el marcador. El Bizkaia Gernika había sido mejor y aprovechó sus opciones. Pichler abrió el marcador con un golpe de castigo y posteriormente transformó el ensayo que anotó Bast y el propio Pichler marcó un golpe de castigo al borde del descanso para llegar intermedio por delante en el luminoso de Urbieta.
Pero en la segunda parte cambiaron las cosas y nada más comenzar, los vallisoletanos anotaron un ensayo transformado y poco a poco fue acortando las diferencias para marcar el definitivo golpe de castigo a cinco minutos del final, dejando a los verdinegros con la miel en los labios.
Jurado, Aboitiz, Martínez, Zabala, Ortiz, Fredrich, Magunazelaia, Bast, Iker Olaeta, Domínguez, Etxaniz, King, Pichler, Palisa y Martitegi formaron ayer el quince inicial del conjunto verdinegro.