La ACB olvida las penas durante su presentación

Francisco Roca anunciaba que el devenir de los 17 clubes participantes se verá «en más de 100 países».

La Liga ACB presentaba ayer la temporada 2016/17, una competición compuesta por 17 equipos, después de que los equipos que lograron el ascenso de la LEB, Melilla y Palencia, y Ourense, renunciasen a tal privilegio, mientras que Gipuzkoa Basket decidiera renunciar a la invitación de la Liga a mantenerse de forma artificial otra campaña más en la élite. En todo caso, la ACB, por boca de su presidente, Francisco Roca, volvió a presumir de que «la verán más de 100 países fuera de nuestras fronteras. Eso solo lo pueden decir NBA, Euroliga y nosotros».

El Auditorio de la sede de Endesa, principal patrocinador de la Liga ACB, fue el escenario escogido para este acto, conducido por el periodista Antonio Lobato y secundado por el humorista Goyo Jiménez. Un acto pretendidamente ágil, en el que cada uno de los 17 clubes que participarán en la ACB 2016/17 saltó a la palestra con un jugador y un «padrino». Así las cosas, el exciclista Joseba Beloki ejerció de padrino baskonista en compañía de Rodrigue Beaubois, mientras que Alex Mumbrú tuvo de acompañante al presentador de televisión Iñaki López. Como curiosidad, el judoka gasteiztarra Sugoi Uriarte ejerció de padrino de Valencia Basket, toda vez que el alavés hace muchos años que vive en la capital del Turia.

Recordatorio y declaraciones

En primer lugar, se envió un recordatorio por el escolta del Barcelona Petteri Koponen, hospitalizado desde el domingo a causa de un accidente de tráfico. El finés padeció un traumatismo craneoencefálico a causa del siniestro, pero según los últimos partes médicos se recupera de sus lesiones y podría abandonar la UCI en próximas horas.

Más allá de la pretendida agilidad de la gala de presentación, trufada de optimismo y buen humor, así como la petición de Francisco Roca para que se cambie la Ley de Mecenazgo, «para que puedan estar dentro las organizaciones deportivas que trabajan las canteras», llegó la hora de los protagonistas, unos más sosos y otros, por fortuna, mucho menos.

Beaubois se presentaba diciendo que «estamos muy emocionados. A pesar de que la pretemporada fue un poco complicada por lesiones y jugadores con sus selecciones, estamos emocionados. Estamos ahora juntos, y el Baskonia luchará siempre para ganarlo todo, empezando la Supercopa», mensaje que corroboró Joseba Beloki.

«Hay que ser conscientes del día a día. Hay un equipo bueno, hay cambios, ausencias y es cuestión de suplirlas para que vayan saliendo los resultados. Pero el ‘Carácter Baskonia’ es algo que se lleva dentro; es el buque insignia con una relación muy directa del equipo con el público, con una afición que deja huella en cada paso que el equipo da, y se contagia en el vestuario», explicaba.

Alex Mumbrú, con tablas en estas presentaciones, simplificó el secreto de su longevidad deportiva. «Me gusta seguir jugando, no llega el día de retirarme. Es una temporada con mucha ilusión, con muchas ganas. Continuamos con el mismo proyecto, con nuestra gente. Conjuntándonos lo antes posible para que la gente de Bilbo se sienta orgullosa de nosotros», dijo.

Iñaki López, por su parte, se sorprendía de «cómo ha calado» Bilbao Basket en la ciudad. «Me encanta el ambiente de Miribilla. La mitad del tiempo la dedico a ver el ambiente», confesó.

La Eurocup por fin aclara su formato

La guerra entre la FIBA y la Euroliga por el control del baloncesto en Europa ha creado un bochornoso vodevil en el que la Eurocup ha sido la principal víctima.

Entre la segunda competición controlada por la Euroliga y la «Fiba Champions League» ha habido un ir y venir de clubes, amenazas y declaraciones a cada cual más vergonzantes, pero que, al fin, parece amainar... hasta que las hostilidades vuelvan a la carga.

Así las cosas, Dominion Bilbao Basket se ha visto en medio de un desastre organizativo, sin conocer cuántos ni qué rivales tendría en la primera fase de la Eurocup, hasta que al fin, ayer se conocía que habrá 20 participantes –no 24– en este evento, divididos en su primera fase en cuatro grupos con cinco equipos cada cual. Se trata de una Eurocup sin equipos turcos ni italianos. Los hombres de negro están encuadrados en el grupo B, junto a Lietuvos Rytas, Khimki, Alba Berlín –primer rival bilbaino, el 19 de octubre en Miribilla– y Fuenlabrada.

La primera fase durará del 12 de octubre al 14 de diciembre, para dar paso a un Top 16 –solo cuatro equipos caerán de esta primera liguilla–, entre el 4 de enero y el 8 de febrero. Los dos primeros de cada grupo se cruzarán en unos cuartos al mejor de tres partidos, entre el 28 de febrero y el 8 de marzo; semifinales al mejor de tres, del 14 al 22 de marzo, y una finalísima, también al mejor de tres, del 28 de marzo al 5 de abril. A. G.